¿Quieres aumentar tus ingresos este verano alquilando la piscina de tu propiedad en España? Descubre cómo.
Una piscina es un bien muy cotizado durante los calurosos veranos en España. Todos quieren tener acceso a una, ya sean residentes o turistas. Puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida durante los meses de intenso calor.
Curiosamente, España no cuenta con muchas piscinas públicas al aire libre y, por lo general, hay que ser socio de un gimnasio para poder utilizarlas. Existen algunas que permiten el acceso por tarifa diaria, pero suelen ser bastante caras.
Si tienes la suerte de tener piscina propia, existe una forma de ganar dinero extra alquilándola.
El alquiler de piscinas lleva tiempo siendo popular en países como Francia y EE.UU., pero en España no despegó hasta 2020.
La primera plataforma en lanzarse aquí fue Swimmy. Desde entonces, han surgido otras como Cocopool y Alkipiscinas, ofreciendo múltiples opciones en distintas localizaciones.
¿Cuánto puedo cobrar por alquilar mi piscina?
Los precios suelen fijarse por persona y hora, con gran variación. Algunas piscinas se alquilan desde 3€/hora, mientras otras alcanzan los 25€/hora.
Por ejemplo, un grupo de 10 personas durante cuatro horas podría generarte entre 120€ y 1.000€.
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¿Cómo anuncio mi piscina?
Para alquilarla, deberás registrarte en una de estas plataformas y cumplir sus normas. Deberás indicar detalles como si estarás presente, si hay acceso a duchas, si es apta para niños o cómo se mantiene.
También puedes especificar si se permiten mascotas o el consumo de alcohol.
Los usuarios valorarán tu piscina, como en Airbnb, y según su popularidad, podrás obtener más reservas y ganancias.
¿Es legal?
Es un área gris, ya que alquilar una piscina con ánimo de lucro podría considerarse una actividad comercial, requiriendo un cambio de uso del suelo.
No obstante, si solo la alquilas ocasionalmente en verano, no se trataría de una actividad comercial permanente.
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Si decides alquilarla, es clave cumplir con requisitos de aforo, comportamiento, higiene y seguro. El Real Decreto 742/2013 establece los criterios técnicos y sanitarios para piscinas, aplicables a las de uso público o colectivo (no meramente familiar).
Además, deberás declarar los ingresos a Hacienda y pagar los impuestos correspondientes. Puedes incluirlo en tu declaración anual, pero consulta con tu gestor cuándo hacerlo.