Los comerciantes de los mercadillos navideños tradicionales de Palma muestran su indignación ante lo que consideran será una competencia desleal por parte de un mercado rival que se instalará en el parque de Sa Feixina.
Detrás de la organización de este mercado, denominado ‘Christmas in Palma’, se encuentra un empresario alemán que anteriormente regentaba un restaurante en el Paseo Marítimo. El evento está programado desdel el 21 de noviembre hasta el 6 de enero, coincidiendo así con el período de los mercados de la Plaça Major, Las Ramblas y otros emplazamientos, y contará aparentemente con 61 puestos. Se comenta que la inspiración es nórdica (alemana) y que los puestos se complementarán con una tarima y pistas de hielo para patinar y deslizarse en trineo.
Entre los feriantes de los mercados organizados por el consistorio reina un profundo descontento. Afirman que este año se han quedado sin puesto alrededor de 70 comerciantes debido a que el número de estos se ha reducido en aproximadamente un veinte por ciento. Ahora sospechan saber el motivo por el cual el ayuntamiento ha realizado dicha reducción.
Uno de ellos declara: “Llevo veinticinco años con el mismo puesto y nunca he faltado a una cita. El primer año tuve que traer mi propia caseta, luego nos dieron puestos de madera, pero toda la mercancía se nos mojaba. Hemos trabajado durante años para animar el mercado y ahora nos tratan de esta manera.”
Mantienen la firme convicción de que el mercado alemán va a competir con ellos. “Y es una competencia injusta. Nadie va a querer venir a vernos a nosotros.” Algunos de los que sí han conseguido un puesto para este año barajan la posibilidad de retirarse por temor a sufrir importantes pérdidas económicas. Incluso se contempla la posibilidad de emprender acciones legales de forma conjunta.
