Una foto del glaciar Birch derrumbándose sobre Blatten este miércoles | Créditos: Servicio Meteorológico de Suiza
Un glaciar colapsó, provocando una avalancha de hielo, rocas y lodo que prácticamente enterró el pueblo entero de Blatten en el cantón suizo del Valais este miércoles, dejando a 300 personas sin hogar y un desaparecido.
Imágenes de drones muestran una alfombra gris donde antes habían casas, caminos y prados. Un video compartido por el Servicio Meteorológico Suizo captó el impactante momento del desastre.
En ese tuit, el servicio comentó: “Imágenes espeluznantes de Suiza, grabadas esta tarde. Millones de metros cúbicos de hielo y roca acaban de destruir el pueblo (ya evacuado) de Blatten [CH], en Valais”. La cuenta de Meteor Express también publicó un video dramático, señalando que el pueblo fue evacuado nueve días antes.
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Unos 3,5 millones de metros cúbicos sepultan al pueblo
El glaciar que colapsó era conocido como el glaciar Birch. El deslave devastador arrazó con el 90% del pueblo bajo él y desencadenó una avalancha de unos 3,5 millones de metros cúbicos de material que bajó la pendiente a gran velocidad.
Los escombros también bloquearon el cauce del río Lonza, según informó la televisión pública suiza RTS desde el lugar.
Las rocas comenzaron a caer del glaciar a principios de este més, informó 20 Minutos. Con los días, aumentó la cantidad de material desprendido, y esta mañana, una evaluación de la situación llevó a la evacuación de los 300 habitantes.
Era solo cuestión de tiempo
“Sabíamos que era cuestión de tiempo. La ladera estaba saturada por el deshielo, y el glaciar actuaba como una cuña inestable entre la roca y el vacío. Fue un desastre natural, pero no una sorpresa”, declaró Kamal Weiss, uno de los expertos que monitoreaba la zona, a medios suizos.
Las autoridades locales afirmaron que el impacto económico será considerable. También advirtieron que el bloqueo del río Lonza podría generar riesgo de inundaciones en los próximos días.
No tardaron los comentarios sobre el cambio climático. Varios expertos señalaron que lo ocurrido en Blatten es otra advertencia sobre el calentamiento global, cuyos efectos seguirán inestabilizando zonas montañosas en los próximos años.