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Productos marcados con un símbolo para indicar su origen europeo en un supermercado danés. Créditos: AP
Los consumidores daneses están boicoteando a Coca-Cola según el CEO de Carlsberg, Jacob Aarup-Andersen.
El CEO de Carlsberg comentó sobre las ventas de productos de Coca-Cola en Dinamarca en una entrevista reciente, afirmando que están experimentando una disminución mientras que las marcas locales ganan participación en el mercado. Atribuyó esta disminución en las ventas a “cierto nivel de boicot por parte de los consumidores hacia las marcas estadounidenses”.
Cuando se le pidió un comentario, el fabricante estadounidense de refrescos no hizo referencia al boicot en Dinamarca, pero dijo que estaba viendo cierto sentimiento negativo por parte de los consumidores en Europa. Coca-Cola es un objetivo frecuente de boicots ya que sirve como un símbolo del gobierno de los Estados Unidos, debido a su estatus como uno de los productos más vendidos de Estados Unidos.
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El caso de Dinamarca está influenciado por las tensiones continuas entre los dos gobiernos en relación con las amenazas de anexión de los Estados Unidos de Groenlandia, un problema que ha tenido un impacto en la opinión pública danesa y ha dañado las relaciones diplomáticas entre los dos países. Los aranceles impuestos por Estados Unidos sin duda han tenido un impacto en la reputación de Estados Unidos en Europa también.
Aunque esta propuesta de anexión aún no se ha perseguido formalmente, ha dejado una impresión duradera en el público danés, alimentando un sentimiento antiestadounidense que ahora puede reflejarse en los hábitos de compra.
En el país, este movimiento está empezando a recibir cierto apoyo económico, con el mayor operador de supermercados de Dinamarca, Salling Group, introduciendo recientemente un símbolo en las etiquetas de precios para denotar las marcas europeas.