COLAS más rápidas en los aeropuertos, la posibilidad de que estudiantes británicos se reintegren al Erasmus, y nuevas garantías sobre los derechos de los ciudadanos: estas son algunas de las promesas destacadas de un acuerdo histórico firmado esta semana por España y el Reino Unido.
El marco, firmado en Londres el 3 de septiembre, no es jurídicamente vinculante, pero establece docenas de compromisos que abarcan viajes, negocios, defensa, clima y cultura.
Ambos gobiernos lo calificaron como un reseteo entre “viejos amigos y aliados cercanos” tras años de tensión post-Brexit.
¿Qué significa para los viajeros?
La mayor ventaja práctica es el acceso recíproco a las puertas electrónicas. Esto significa que los turistas británicos que vuelen a España pronto podrían utilizar los mismos escáneres automáticos de pasaporte que los ciudadanos de la UE, reduciendo las largas colas en los aeropuertos.
A cambio, los españoles que lleguen al Reino Unido disfrutarían del mismo tratamiento exprés. Los funcionarios afirmaron que el proceso de entrada más fluido sería un “símbolo visible” de lazos más estrechos.
¿Y los jóvenes y estudiantes?
El acuerdo destaca los planes para un programa de movilidad juvenil: un sistema de visados temporales que permitiría a los jóvenes vivir, trabajar o estudiar con mayor facilidad en el país del otro. Sin duda, música para los oídos de los jóvenes atrapados por el Brext en el Reino Unido.
También renueva la esperanza de que el Reino Unido pueda reincorporarse al Erasmus+, el programa de intercambio estudiantil de la UE que abrió puertas a miles de jóvenes británicos hasta que el Brexit los excluyó.
De acordarse, permitiría nuevamente a los estudiantes británicos estudiar en toda Europa con apoyo financiero, y atraería a más europeos a las universidades británicas.
¿Qué hay para los expatriados?
Hay nuevas garantías para los millones de ciudadanos británicos en España y españoles en el Reino Unido.
El marco reafirma derechos ya protegidos por el Acuerdo de Retirada —como la residencia y la sanidad—, pero también promete trabajar en problemas que quedan fuera de él, incluida la coordinación de la seguridad social.
Eso significa que las pensiones, las prestaciones y los derechos sanitarios de aquellos no cubiertos por las normas del Brexit seguirán sobre la mesa.
¿Cómo se beneficiarán las empresas?
Los dos países ponen en marcha un nuevo Diálogo sobre Comercio e Inversión con reuniones anuales entre ministros y líderes empresariales.
Está diseñado para reducir la burocracia y crear oportunidades para las pequeñas y medianas empresas.
Por ejemplo, podrían existir normas más fluidas para los viajes de negocios a corto plazo, o nueva cooperación en ciencia y tecnología a través de programas de la UE como Horizon Europe.
Ambas partes también quieren colaborar en tecnología digital, proyectos espaciales e incluso en la descarbonización de las flotas pesqueras.
Clima y energía: ¿qué se planea?
Londres y Madrid firmarán un nuevo memorándum energético para aunar experiencia en energías renovables.
Esto incluye energía solar en tejados, eólica marina, hidrógeno y los desafíos únicos de las ‘redes insulares’ como las de Canarias o los pequeños sistemas del Reino Unido.
Un panel empresarial anual de energía limpia reunirá a empresas para acelerar la inversión en la transición verde.
Para los lectores, el impacto práctico podría traducirse en más proyectos de energías renovables, menores emisiones de carbono y posiblemente menores costes energéticos a largo plazo.
Seguridad y defensa: ¿qué cambia?
Un nuevo Memorándum de Entendimiento en Defensa acercará a los dos países en estrategia, desarrollo de armamento y cooperación militar.
Eso significa que se espera que las fuerzas armadas británicas y españolas entrenen y operen juntas con más frecuencia, mientras que sus industrias podrían desarrollar tecnología de defensa conjuntamente.
En el ámbito policial, ambos países ampliarán la cooperación contra el crimen organizado, el narcotráfico, el terrorismo y las ciberamenazas, utilizando inteligencia compartida a través de Europol e Interpol.
Cultura, deporte y vida cotidiana
El marco también destaca la cooperación cultural —con apoyo continuo al British Council, el Instituto Cervantes y los programas educativos hispano-británicos—.
El deporte también está en la agenda: España y el Reino Unido compartirán experiencia en el desarrollo del deporte femenino y la organización de grandes torneos, con el Reino Unido como sede de la EURO 2028 y España como coanfitrión del Mundial de 2030.
Otro detalle cotidiano es el reconocimiento mutuo de los permisos de aparcamiento para discapacitados —lo que significa que la Blue Badge británica y los permisos españoles podrían ser reconocidos en ambos países, un impulso para los viajeros con discapacidad—.
¿Por qué es importante?
Nada de esto está garantizado: el marco es político, no jurídicamente vinculante.
Pero crea diálogos y memorandos anuales que comprometen a ambos gobiernos a un ritmo de reuniones y revisiones de progreso.
Eso significa que ahora existe una forma estructurada de avanzar en lo que afecta directamente a los ciudadanos: fronteras más rápidas, intercambios estudiantiles, pensiones y sanidad, energía más limpia y calles más seguras.
Para los lectores, los grandes hitos a seguir son:
- Si las puertas electrónicas se activan realmente para los británicos en los aeropuertos españoles.
- Si se concreta un programa de movilidad juvenil y un acuerdo sobre el Erasmus+.
- Si se firma el memorándum energético y le siguen proyectos reales.
- Si el pacto de defensa pasa del papel a la práctica.
Si se cumplen estas promesas, la retórica de los “viejos amigos y aliados cercanos” podría pronto traducirse en vacaciones más rápidas, nuevas oportunidades para los jóvenes y una cooperación más profunda en todo, desde la lucha contra el crimen hasta el cambio climático.
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