¿El sistema de escuelas públicas en Hamburgo, Alemania, prohibió las clases de música para no ofender a los musulmanes que las consideran prohibidas o ‘haram’? No, eso no es cierto: Las escuelas públicas de Hamburgo no hicieron tal cosa. Un reportaje en alemán ha sido malinterpretado en publicaciones de redes sociales. El reportaje siguió a la firma de una declaración conjunta por representantes religiosos y oficiales escolares contra la intolerancia y la exclusión, una medida motivada por algunos incidentes de acoso escolar por motivos religiosos.
Un clip de video de 33 segundos apareció en una publicación en X de @realMaalouf el 29 de septiembre de 2025. La publicación decía:
ALEMANIA: En Hamburgo, ya no se permiten las clases de música (canto, piano, guitarra) en las escuelas públicas porque la música es ‘haram’ en el Islam, y se consideraría islamofobia imponerselas a los estudiantes musulmanes. ¿Opiniones?!
Musulmanes amenazan a compañeros de clase
Hamburgo toma una línea clara contra la discriminación
Este reportaje fue publicado por welt.de el 25 de junio de 2025. El tema es “Acoso escolar en las escuelas de Hamburgo”. El titular original, “„Musikunterricht kann nicht stattfinden, weil man im Islam nicht singt”” se traduce como:
“Las clases de música no pueden realizarse porque no se permite cantar en el Islam.”
Estos siguen siendo casos aislados, pero aparentemente tan numerosos que la Senadora de Educación de Hamburgo ahora reacciona junto con asociaciones religiosas cristianas, judías y musulmanas. El problema son agresiones y discriminación, predominantemente por estudiantes musulmanes. Por ejemplo, algunas chicas alemanas son atacadas – se les dice que no pertenecen aquí – mientras que a otras se les impide asistir a clases de música porque es haram. Según el Senador Bekeris, estas agresiones no serán toleradas, ni una sola.
La página de Facebook de las Escuelas Católicas de Hamburgo publicó una entrada sobre la firma de la declaración conjunta el 18 de junio de 2025. Una foto en la publicación tiene un pie de foto que dice:
Las comunidades religiosas toman posición
contra la intolerancia y la exclusión
La publicación en Facebook incluye el texto de la declaración conjunta:
Promover y proteger la diversidad de Hamburgo – Hamburgo y sus comunidades religiosas muestran una postura para un diálogo respetuoso
Hamburgo es una ciudad de diversidad cultural y religiosa.
De esta riqueza formamos el futuro de nuestra ciudad. Los niños y adolescentes crecen juntos y practican entre ellos desde temprano en el kinder y la escuela. Aquí se conocen y se aprecian con sus peculiaridades y similitudes. Se dan cuenta de las diferencias y practican en el diálogo resolver conflictos de manera pacífica y constructiva.
En las guarderías y escuelas de Hamburgo no hay lugar para el abuso y la discriminación de ningún tipo. Todos los que son responsables en guarderías y escuelas muestran actitud cuando las personas son abusadas o son presionadas por otros. El kinder y la escuela muestran actitud cuando grupos enteros son sometidos a sospecha general debido a incidentes inaceptables o cuando individuos son excluidos o incluso difamados por su pertenencia a un grupo.
Esta actitud corresponde a los valores compartidos por las comunidades religiosas y la ciudad, y se forman diariamente en la educación religiosa para todos. El respeto mutuo prohibe cualquier tipo de imposición: no importa quién, contra quién y especialmente cuando se ejerce coerción bajo la cubierta de supuestas regulaciones religiosas. Todas las comunidades religiosas involucradas se pronuncian claramente contra la discriminación y el extremismo, sin importar a quién pertenescan. Las comunidades religiosas defienden un entendimiento mutuo respetuoso, con una actitud que dibuja límites claros.
Como socios de cooperación, las comunidades religiosas trabajan estrechamente con las autoridades en el contexto escolar y más allá, para formar la vida en la ciudad hanseática mediante el diálogo. Así contrarrestan la discriminación y la radicalización. En la educación religiosa para todos, los estudiantes aprenden juntos, completamente independiente de su trasfondo religioso y secular. Reconocen similitudes, exploran diferencias y practican una interacción apreciativa con la diversidad cultural y religiosa. Así se crea el entendimiento mutuo y la cooperación respetuosa que aseguran la cohesión en nuestra ciudad.