Nota de la editora: Este artículo es una republicación. Su publicación original fue el 16 de marzo de 2025.
Imagínate notar una pequeña protuberancia en la ingle o el vientre que no duele demasiado. Quizás pienses: “No es gran cosa, ya me ocuparé más adelante.” Eso es exactamente lo que pensé cuando descubrí mi propia hernia. Durante décadas, he guiado a personas para que tomen el control de su salud, así que supuse que mi estilo de vida saludable la mantendría bajo control. Esperé un año para solucionarlo — pero fue un error.
Cuando hablé con el Dr. Eric Pinnar, un especialista en cirugía de hernias de Jacksonville, Florida, me aclaró las cosas: las hernias no suelen curarse por sí solas — solo empeoran. En nuestra última entrevista, Pinnar compartió información valiosa sobre la reparación de hernias y explicó por qué no se recomienda la “espera vigilante”.
Todavía teníamos más que discutir, así que en esta segunda entrevista, Pinnar compartió más ideas reveladoras que ojalá hubiera conocido antes. Se las transmito aquí — por qué importan las hernias, cómo elegir un cirujano, qué opciones quirúrgicas existen y cómo recuperarse correctamente.
Mi travesía con la hernia — Una lección sobre no esperar
Primero detecté un pequeño bulto en la ingle. No me molestaba mucho, así que lo pasé por alto. Después de todo, estoy en buena forma física — el día antes de mi cirugía, hice 125 dominadas. Sin embargo, las hernias no son cuestión de fitness. Se trata de un punto débil en el tejido conectivo.
Cuando finalmente contacté a Pinnar, me explicó que las hernias crecen con el tiempo, lo que hace que la cirugía sea más complicada y riesgosa. Aprendí de mi propia operación que retrasarla solo sube la apuesta. Si notas una protuberancia que persiste, no esperes como yo — haz que la revisen y repárala de inmediato. Como dice Pinnar: “El momento de reparar una hernia es cuando la encuentras.”
¿Cómo elegir al cirujano adecuado para tu reparación de hernia?
Elegir un cirujano no es como elegir un gadget nuevo — hay que acertar, y tú llevas el volante. Despedí a mi primer cirujano, no por falta de habilidad, sino porque su consultorio era un desastre y me reprogramó la cita cuatro veces.
Fue entonces cuando recurrí a Pinnar. Cuando hablé con él, su experiencia y enfoque centrado en el paciente me convencieron. Incluso luchó por conseguir la malla exacta que yo quería, a pesar de los inconvenientes. Esto es lo que le digo a la gente que busque:
- La experiencia importa — Encuentra a alguien que haya realizado muchas reparaciones de hernias. Más cirugías en su haber significan que ha visto de todo.
- La comunicación es clave — Tu cirujano debe responder tus preguntas con claridad. Si te apresuran, es una señal de alarma.
- Defensa del paciente — Quieres un cirujano que luche por lo mejor para ti. Pinnar fue eso para mí.
Si no estás seguro de a qué cirujano acudir, pregunta — amigos, familiares o incluso reseñas en línea pueden dirigirte a alguien confiable. Recuerda, siempre puedes buscar una segunda opinión. “Tú tienes el control,” nos recuerda Pinnar. No te conformes si algo no te parece bien. Y si el seguro limita tus opciones, ten en cuenta que expertos como Pinnar, que evitan el seguro para brindar una mejor atención, podrían valer la pena si puedes costearlo.
¿Cuáles son tus opciones quirúrgicas y de materiales?
La cirugía de hernia no es única para todos, y lo aprendí de primera mano. Hay dos formas principales de repararla, además de opciones sobre el material usado para el parche. Este es el resumen:
- Tipos de cirugía:
- Cirugía abierta — El cirujano hace una incisión más grande para reparar la hernia directamente. Es probada y verdadera, pero implica más tiempo de recuperación.
- Cirugía mínimamente invasiva — Pequeñas incisiones con herramientas como un laparoscopio o robot. Yo opté por la cirugía laparoscópica robótica para cicatrices más pequeñas y una curación más rápida — aunque la recuperación aún me desconcertó.
Elegí la vía mínimamente invasiva, y Pinnar me explicó por qué se adecuaba a mi caso. Pregunta a tu cirujano qué es lo mejor para ti — el tamaño de tu hernia y tu salud influyen.
- Opciones de malla — La mayoría de las reparaciones usan malla para parchar el punto débil, como reforzar un desgarrón en tu camisa favorita. Pero no todas las mallas son iguales:
- Malla sintética — A base de plástico, como el polipropileno. Las versiones más nuevas “ligeras” tienen agujeros más grandes para reducir la irritación. Es económica y común, pero a mí no me atraía la idea de tener plástico permanente en mi cuerpo. Aún así, la cantidad de plástico utilizada es muy pequeña e improbable que represente un riesgo significativo para la mayoría de la gente.
- Malla biológica — Hecha de tejido animal, como intestino de cerdo. Yo elegí esta — Surgisis — porque me pareció más natural, aunque costó más.
- Malla híbrida — Combina materiales sintéticos y reabsorbibles. A Pinnar le gustan opciones como ProGrip por su facilidad de uso.
Yo insistí en la malla biológica, y Pinnar lo hizo realidad. Pregunta a tu cirujano: “¿Qué malla recomienda y por qué?” Asegúrate de que su razonamiento te convenza.
Preparándose para la cirugía — Lecciones de mi experiencia
Pensé que me recuperaría rápido — pero me equivoqué de nuevo. Cuando hablé con Pinnar, me advirtió que la recuperación podría ser más dura de lo esperado, incluso con mi nivel de fitness. Necesité una silla de ruedas para salir del hospital. Esto es lo que ojalá hubiera hecho:
- Planifica tiempo de inactividad — Espera al menos una semana fuera del trabajo. Incluso las incisiones pequeñas requieren tiempo para sanar. Pinnar dice que cada persona es diferente — algunos se recuperan rápido, otros necesitan semanas.
- Organiza ayuda — Idealmente, ten a alguien — una pareja, amigo o asistente contratado — cerca durante los primeros días. Podrías necesitar ayuda para salir de la cama o tomar un tentempié.
- Plan para el dolor — Habla con tu cirujano sobre el alivio del dolor. Al principio rechacé los medicamentos y me arrepentí. Un bloqueo regional me adormeció por un día, pero después, necesité algo. Medicamentos como el ibuprofeno o incluso narcóticos ayudan — solo no exageres.
Consejos para la recuperación — Descanso, alivio del dolor y evitar el estreñimiento
La recuperación me golpeó más fuerte de lo pensado, y aprendí grandes lecciones que quiero compartir:
- No hagas ejercicio mientras sanas — No pude entrenar con normalidad durante semanas — incluso caminar demasiado me ralentizaba. La energía de tu cuerpo debe ir a la curación, no a levantar pesas. Además, esforzarse demasiado pronto arriesga a deshacer la reparación, así que da tiempo a tu cuerpo para sanar.
- Toma analgésicos cuando sea necesario — Como mencioné, intenté aguantar sin medicamentos para el dolor y pagué las consecuencias. Pinnar sugiere ibuprofeno y paracetamol juntos para prescindir de los narcóticos. El uso a corto plazo me ayudó — ojalá hubiera empezado antes.
- Aborda el estreñimiento — Tras la cirugía de hernia, el estreñimiento es una preocupación común debido a la interrupción de la función intestinal normal y la necesidad de tu cuerpo de conservar energía para curarse. Si bien la fibra es generalmente beneficiosa para promover movimientos intestinales saludables, un microbioma comprometido, afectado por alimentos procesados y toxinas ambientales, puede llevar a efectos negativos de la fibra, como hinchazón y gases.
Esto ocurre porque, en un intestino desequilibrado, el consumo de fibra resulta en la producción de endotoxinas en lugar de ácidos grasos de cadena corta beneficiosos como el butirato. El butirato, producto de una fermentación saludable de la fibra, es clave para la salud del colon, alimentando a los colonocitos y manteniendo la integridad de la barrera intestinal.
Un suplemento de butirato de liberación retardada, diseñado para liberarlo directamente en tu colon, podría eludir la necesidad de una alta ingesta de fibra en personas con función intestinal alterada o aquellas que se recuperan de cirugías como la reparación de hernia, donde tu sistema digestivo se ralentiza temporalmente.
Mientras tanto, prueba con magnesio, en una dosis lo suficientemente alta como para causar heces ligeramente blandas. Yo prefiero el glicinato de magnesio y el malato de magnesio, ya que se absorben bien y son suaves con el sistema digestivo.
Sé tu propio defensor de la salud
El sistema de salud es una jungla, pero puedes abrirte camino. Pinnar no acepta seguros, centrándose en la calidad de la atención. Pagué de mi bolsillo y no me arrepiento — una inversión sólida en mi salud. Así es como puedes abordarlo:
- Revisa tu seguro — Si tienes cobertura, verifica qué incluye — cirugía, hospital, medicamentos y proveedores.
- Claridad en los costos — Obtén un precio claro. Los hospitales cubren la malla, pero tipos especiales podrían no ser estándar.
- Toma el control — Cuestiona todo — ¿por qué este enfoque, por qué esa malla? Si no cuadra, busca otra opinión.
Para obtener más información sobre la práctica de Pinnar o consultar con él, puedes encontrarlo en línea en Advanced Hernia Specialists. Es un recurso excelente si estás explorando opciones para cirugía de hernia.
Recuerda, las hernias no son un juego — esperar es una apuesta que no quieres tomar. Yo lo aprendí por las malas. Actúa rápido, encuentra un cirujano hábil que esté de tu lado, sopesa tus opciones y prepárate antes de la cirugía. Tienes el poder — haz preguntas, apóyate en la ayuda posoperatoria y tómate tiempo para sanar. Saldrás más fuerte.
Preguntas frecuentes — Tus dudas sobre hernias respondidas
P: ¿Cuál es la ventaja de la cirugía de hernia?
R: Parchea el punto débil, evita que la protuberancia crezca y reduce el riesgo de problemas serios. La intervención temprana también simplifica el procedimiento y reduce complicaciones.
P: ¿Hay desventajas en la cirugía de hernia?
R: Espera algo de dolor, hinchazón o moratones cerca de la incisión. Los problemas a largo plazo son raros con un cirujano experimentado. Sin embargo, el tiempo de recuperación varía significativamente, incluso con procedimientos mínimamente invasivos.
P: ¿Es segura la cirugía de hernia?
R: El procedimiento es rutinario y de bajo riesgo con un profesional. Las infecciones ocurren, pero son poco comunes. Elegir un cirujano con experiencia sustancial en reparación de hernias reduce significativamente estos riesgos.
P: ¿Para qué sirve la malla?
R: Refuerza la reparación, como un parche resistente. Las opciones van desde plástico a biológico. Tus preferencias personales sobre los materiales de malla deben ser discutidas a fondo con tu cirujano.
P: ¿Cómo elijo al cirujano correcto?
R: Habla con un experto en hernias como Pinnar. Pregunta sobre su historial, estilo quirúrgico y preferencia de malla. No dudes en obtener una segunda opinión. Asegúrate de que tu cirujano esté dispuesto a abogar por tus opciones de tratamiento y materiales deseados.
