La Torre Eiffel estubo cerrada el jueves por una huelga general en Francia convocada por los principales sindicatos del país.
Los manifestantes salieron a las calles de más de 200 ciudades en toda Francia para denunciar los recortes de gastos y pedir más impuestos a los ricos. Esta es la última de una serie de protestas que empezaron el mes pasado en medio de una crisis política y discusiones intensas sobre el presupuesto.
En París, miles de trabajadores, jubilados y estudiantes comenzaron a marchar el jueves por la tarde desde la Plaza de Italia. Un cartel en la Torre Eiffel informaba a los visitantes que estaba cerrada por la huelga y se disculpaba.
Un letrero dice: “Debido a una huelga, la Torre Eiffel está cerrada, lo sentimos”, con la Torre Eiffel al fondo, durante un día nacional de huelga convocado por los ocho mayores sindicatos de Francia para pedir medidas de “justicia social”, en París, el 2 de octubre de 2025.
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Los sindicatos piden al Primer Ministro Sébastien Lecornu que abandone las medidas propuestas en el borrador de presupuesto de su antecesor, que incluyen congelar la ayuda social y medidas de austeridad que mucha gente dice que reducirán aún más el poder adquisitivo de los trabajadores con salarios bajos y de la clase media. También exijen impuestos más altos para las personas ricas.
Lecornu, que fue nombrado el mes pasado, aún no ha presentado los detalles de sus planes presupuestarios y todavía tiene que nombrar a sus ministros de gobierno, lo que se espera que pase en los próximos días. El parlamento, que está muy dividido, debe debatir el proyecto de ley de presupuestos antes de que termine el año.
Sophie Binet, la líder del sindicato CGT, dijo el jueves: “Es verdad, es la primera vez que hay tres días de huelgas y protestas en un mes sin un gobierno o un presupuesto. Esto muestra el nivel de enfado social”.
Hablando en la cadena de noticias BFM TV, le preguntaron sobre el momento de la última acción: “¿Por qué protestamos ahora? Porque sentimos que ahora es cuando se están tomando las decisiones, y queremos que nos escuchen”.
El sindicato dijo que casi 600,000 personas participaron en las huelgas y protestas en todo el país, según informó France 24. La Prefectura de Policía de París dijo que aproximadamente 24,000 personas participaron en la manifestación en París.
La SNCF, la compañía ferroviaria nacional, dijo que los servicios de trenes de alta velocidad funcionaban con normalidad el jueves, mientras que algunas líneas regionales se vieron afectadas por interrupciones parciales. En París, el tráfico de metro era casi normal, pero muchos trenes de cercanías circulaban con capacidad reducida.
Algunos profesores y trabajadores de la salud también se unieron a la huelga, que sigue a las protestas del mes pasado. El 18 de septiembre, más de 500,000 manifestantes marcharon en las pequeñas ciudades y grandes urbes de Francia, incluyendo París, según cifras de la policía y el ministerio del interior. Los sindicatos informaron de más de 1 millón de huelguistas y manifestantes en todo el país. La semana anterior, un día de acción contra el gobierno por toda Francia dejó calles llenas de humo, barricadas en llamas y gases lacrimógenos durante la campaña “Bloquear Todo”.