Los datos del gobierno mexicano revelan que el número de animales infestados con el gusano barrenador del Nuevo Mundo (NWS), un parásito que come carne, ha aumentado en un 53% en las cuatro semanas hasta mediados de agosto.
Si bien las infestaciones por estas larvas de mosca afectan principalmente al ganado, las autoridades mexicanas también han registrado casos en perros, caballos, ovejas y en humanos.
Según los medios locales, docenas de personas han sido tratadas por esta infestación en hospitales de los estados del sur de México, como Campeche y Chiapas.
Este aumento en México ocurre poco después de que las autoridades sanitarias de EE. UU. confirmaran el primer caso humano en un paciente que había regresado de El Salvador.
El NWS se declaró erradicado en los Estados Unidos en 1966, después de liberar moscas macho estériles para interrumpir su ciclo reproductivo, y México hizo lo mismo en 1991.
Sin embargo, ha seguido siendo común en áreas tropicales y subtropicales de América Central y del Sur y recientemente se ha propagado hacia el norte, con el primer caso nuevo reportado en México en noviembre de 2024.
Las moscas hembra del gusano barrenador (Cochliomyia hominivorax) ponen sus huevos en o cerca de heridas abiertas en la piel de animales de sangre caliente. También se sienten atraídas por las membranas mucosas, como las de la nariz, la boca, los párpados, las orejas y los genitales.
Los huevos eclosionan en larvas que se entierran en la herida o la membrana, alimentándose del tejido vivo.
La infestación se llama miasis y, si no se trata, puede causar daños graves e incluso ser fatal, ya que las larvas desgarran el tejido con sus afilados ganchos bucales.
Los funcionarios de salud advierten que, aunque los casos fatales en humanos son raros, las personas con problemas de salud preexistentes y los ancianos deben tener mucho cuidado.
El ministerio de salud de México informó de que una mujer de 86 años murió en julio en Campeche por un cáncer de piel que se vio agravado por una infestación de estas larvas.
Quienes corren más riesgo son las personas que trabajan con ganado o viven en zonas rurales donde hay animales infestados.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. recomiendan que las personas que hayan visitado una región con estas moscas estén alerta a los síntomas, como lesiones cutáneas inexplicables, sentir que las larvas se mueven dentro de una herida, o ver gusanos en una llaga abierta.
Los expertos señalan que la prevención es clave cuando se visitan áreas rurales en las regiones afectadas. Esto incluye mantener las heridas limpias y cubiertas, y usar repelente de insectos.
También piden a las personas que sospechen que puedan estar infestadas que busquen ayuda médica inmediatamente.
