El primer ministro Mark Carney parte el domingo para reunirse con aliados europeos y de la OTAN
En medio de tensiones crecientes en Medio Oriente y horas después de que EE.UU. se uniera a la guerra de Israel contra Irán, el primer ministro viajará a Bruselas el lunes. Allí firmará un acuerdo de seguridad y defensa con la Unión Europea.
El presidente Donald Trump abandonó temprano la cumbre del G7 en Kananaskis, argumentando que debía regresar a la Casa Blanca para manejar el conflicto, donde Israel busca no solo destruir el programa nuclear iraní sino provocar un cambio de régimen.
El domingo, fuerzas estadounidenses bombardearon tres sitios en Irán. Trump declaró que las instalaciones nucleares clave fueron "totalmente destruidas" y advirtió a Teherán sobre represalias, ofreciéndoles elegir entre "paz o tragedia".
Después de Bruselas, Carney asistirá a una cumbre reducida de la OTAN en La Haya.
Janice Stein, experta en asuntos globales, señaló que los aliados probablemente no discutirán formalmente la guerra, pero pasarán mucho tiempo hablando del tema informalmente.
¿Qué gana Europa con Canadá?
Con la alianza occidental en crisis bajo Trump, ¿podría Canadá acercarse más a Europa en defensa? Aunque su ejército es limitado, ofrece otros recursos valiosos.
La cumbre de la OTAN se centrará en la exigencia de EE.UU. de que los aliados aumenten el gasto en defensa al 5% del PIB (3.5% en fuerzas armadas y 1.5% en infraestructura). Datos recientes muestran que EE.UU. gastaría un 3.38% en 2024, pero el Pentágono proyectó solo un 2.7%.
Expertos como Seth Jones indican que el próximo presupuesto estadounidense podría ser menor, históricamente, que en la era de Carter. "Esto muestra que EE.UU. pide más a otros, pero su gasto real es bajo", afirmó.
(Algunos errores/typos posibles: "argumentando" → "arguyendo", "represalias" → "represallias")
