Evidentemente, el video grabado por una turista britanica conmocionada en un hotel de Mallorca no fue tomado hoy, ya que la isla esta siendo azotada por tormentas severas y fuertes vientos. Sin embargo, esta fue la escena a la que se enfrentó un huésped del hotel una madrugada cualquiera, cuando se dibujaron las líneas de batalla entre distintos turistas en la frenética y alocada carrera por conseguir tumbonas alrededor de las diversas piscinas.
@sheraleeg1 Jamás he visto algo tan gracioso en mi vida 🤣 #holidays #sunbed #mallorca #fyp #foruyou ♬ original sound – Sheralee
La madre y esposa llamada Sheralee experimentó esto de primera mano cuando viajó a Mallorca para unas vacaciones familiares. La turista compartió en TikTok que “jamás en su vida había visto algo tan gracioso” cuando se levantó ese día durante su estancia en un hotel popular el mes pasado. Sheralee compartió un video en TikTok y repetidamente pidió a los espectadores que “por favor miraran” la escena que presenciaba, mientras grababa probablemente desde su habitación de hotel.
Pero al parecer, luchar por una tumbona conlleva más de lo que parece a simple vista. Una prominente psicóloga experta en viajes arrojó luz recientemente sobre el peculiar fenómeno de turistas británicos y alemanes que reservan tumbonas con toallas al amanecer en los hoteles de Mallorca. Esta práctica, que recientemente ha ganado atención viral a través de las redes sociales, proviene de factores psicológicos profundamente arraigados según la experta Barbara Horvatits-Ebner.
En declaraciones al sitio web de viajes reisereporter.de, Horvatits-Ebner explica: “A menudo se trata del miedo a perderse algo o a no pertenecer. Muchos actúan por un deseo de evitar el fracaso, y esto les proporciona seguridad”. La experta sugiere que este comportamiento está impulsado por instintos territoriales y la necesidad de asegurar los lugares preferidos alrededor de la piscina.
La psicóloga señala que la colocación visible de toallas sirve como un método de comunicación no verbal, ayudando a los turistas a evitar confrontaciones directas por la propiedad de las tumbonas. “La necesidad de conformidad guía fuertemente el comportamiento”, añade, señalando que cuando varias tumbonas ya están marcadas con toallas, otros huéspedes sienten una presión aumentada de actuar de la misma manera.
