El Ayuntamiento de Alhaurín el Grande ha aprobado oficialmente una nueva ordenanza municipal de tráfico, que sustituye a la obsoleta normativa del 2001 sobre los patinetes eléctricos.
La normativa actualizada, ya en vigor, introduce medidas mucho más estrictas para los vehículos de movilidad personal, debido a su creciente popularidad y al consiguiente aumento de accidentes.
Entre las disposiciones clave se incluye el uso obligatorio del casco, efectivo inmediatamente, y un seguro de responsabilidad civil terceros obligatorio para los conductores, a partir del 1 de enero de 2026. A partir de octubre, la policía intensificará los controles de tráfico e impondrá sanciones más severas por incumplimiento. Pablo Rengel, jefe de la policía local, subrayó que, hasta la fecha, Alhaurín el Grande es uno de los pocos municipios de la provincia con una regulación clara al respecto. “Solicitamos la colaboración y concienciación de los vecinos, ya que, a pesar de carecer de motor, estos vehículos deben seguir las mismas normas de circulación que el resto”, afirmó.
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El municipio ha iniciado una implantación por fases, comenzando con charlas educativas en colegios, seguidas de campañas informativas y próximos controles policiales en intersecciones clave. Una campaña de seguridad vial dirigida a los centros escolares pretende inculcar el respeto por las normas de tráfico desde una edad temprana. El alcalde, Antonio Bermúdez, expuso los riesgos que conlleva el uso irresponsable de estos vehículos, recordando las 14 víctimas mortales registradas a nivel nacional en 2024. “Son vehículos como cualquier otro, con obligaciones y normativa. Esta nueva normativa refuerza la seguridad de peatones y conductores”, señaló.
Con esta medida, Alhaurín el Grande da un paso significativo para combatir el uso peligroso de los patinetes, priorizando la seguridad de todos los usuarios de la vía pública y los peatones.