La policía australiana ha suspendido la búsqueda de un niño de cuatro años que lleva desaparecido en el interior del país por casi tres semanas, después de que nuevos esfuerzos no lograran encontrar ningún rastro del pequeño.
Gus Lamont fue visto por última vez jugando afuera de su casa en una estación de ovejas remota cerca de Yunta, a unos 300 km de Adelaida, el 27 de septiembre.
Su abuela lo dejó solo por aproximadamente media hora antes de ir a verlo, solo para descubrir que el niño no estaba, lo que provocó una de las búsquedas terrestres y aéreas más grandes en la historia de Australia del Sur.
La policía -que no sospecha de juego sucio- dice que seguirá investigando, pero que el caso se ha convertido en una “operación de recuperación”.
La semana pasada, las autoridades redujeron brevemente la búsqueda, solo para reanudarla el martes con la ayuda de 80 efectivos de la Fuerza de Defensa australiana.
El Comisionado Grant Stevens dijo que las autoridades estaban buscando en un área más amplia basándose en evaluaciones actualizadas de especialistas en supervivencia, medicina y búsqueda, en lugar de en información nueva.
El viernes, la policía confirmó que la nueva búsqueda no había revelado ninguna señal de Gus.
“El hecho de que Gus sea un niño pequeño, el terreno sea extremadamente accidentado, hostil y sujeto a condiciones climáticas cambiantes, ha dificultado la búsqueda y la ha hecho más desafiante para los involucrados”, dijo la policía en un comunicado.
Se ha cubierto aproximadamente 470 km² -un área aproximadamente el doble del tamaño de Edimburgo- y se espera que un grupo de trabajo de 12 personas establecido esta semana continúe investigando. La policía no descarta realizar más búsquedas en la propiedad en el futuro.
A Gus, a quien describen como un niño aventurero pero tímido, se le vio por última vez con un gorro gris, pantalones largos gris claro, botas y una camiseta de manga larga azul con un personaje amarillo de los Minions. La policía cree que se fue a explorar solo.
El caso ha despertado un enorme interés en toda Australia, con imágenes del niño rubio de cabello rizado presentes en todos los medios locales y mucha especulación en línea.
Esto llevó a la policía a pedir al público que deje de llamarles con sus “opiniones” y a solicitar que obtengan información de fuentes creíbles.
Su advertencia llegó después de que imágenes falsas del niño generadas con inteligencia artificial se difundieran en las redes sociales, las cuales fueron investigadas por el equipo de Verificación de la BBC.
La policía dijo esta semana que la familia del niño se mantiene “estoica” a pesar de las trágicas circunstancias.
“Pueden imaginar cómo se sienten… sin tener respuestas sobre dónde está exactamente Gus y qué le ha pasado. Esto sería traumático para cualquier familia”, dijo el Comisionado Stevens.
A través de un portavoz, la familia Lamont había dicho anteriormente que están “devastados” por la desaparición de Gus.
“Esto ha sido un shock para nuestra familia y amigos, y nos cuesta comprender lo que ha sucedido”, dijo Bill Harbison, según la Australian Broadcasting Corporation.
“La ausencia de Gus la sentimos todos, y lo extrañamos más de lo que las palabras pueden expresar.”