Identificado el turista británico ebrio que forzó un aterrizaje de emergencia
Se ha identificado al turista británico que, en estado de ebriedad, obligó a un vuelo de Ryanair con destino a España a realizar un aterrizaje de emergencia.
Daniel Ashley-Laws fue grabado siendo reducido y desalojado del avión por la policía francesa fuertemente armada, tras intentar supuestamente abrir una puerta de emergencia durante el vuelo del viernes, según informa The Sun.
El vuelo FR8379, que se dirigía a Alicante y había despegado del aeropuerto de Luton, se vio forzado a desviarse a Toulouse después de que el grupo de despedida de soltero armara un caos.
No obstante, poco después de ser arrestado, el albañil publicó en sus redes sociales fotografías desde Benidorm en las que parecía burlarse de su detención.
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Un vídeo sobrecogedor muestra al hombre tatuado siendo arrastrado por la oreja mientras forcejea con los agentes, trepando por los asientos y gritando mientras la policía intentaba sujetarlo.
El material se viralizó rápidamente y fue difundido por medios de comunicación de todo el mundo, incluyendo España y Francia.
Una fuente policial declaró a The Sun: “Se encontraba junto a una puerta de emergencia e intentó abrirla. Fue aterrador para el resto de los pasajeros. El piloto no tuvo más opción que aterrizar la aeronave”.
El albañil y su hijo se encontraban entre los cinco hombres desalojados por la Compañía de Gendarmería de Transporte Aéreo (CGTA) de Francia cuando el avión aterrizó en Toulouse el viernes por la tarde.
Se puede escuchar a un hombre, que se cree es el hijo de Ashley-Laws, gritar “¡Ellos empezaron, ese es mi padre!” mientras los agentes sacan a ambos del avión.
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Según la policía, el nivel de alcoholemia de Ashley-Laws era tan elevado que transcurrieron varias horas antes de que pudiera ser interrogado.
Sin embargo, en lugar de enfrentarse a la justicia desde una celda francesa, el individuo fue posteriormente fotografiado de fiesta en Benidorm.
Una imagen muestra al alborotador, de cabeza rapada, riéndose con una camisa hawaiana mientras dos amigos le tiran de la oreja, imitando a la policía francesa.
El pie de foto reza: “El jefe final de Benni – unos chavales franceses jeje locura”.
Según la legislación francesa, poner en peligro la seguridad de una aeronave conlleva una pena máxima de cinco años de prisión y una multa de aproximadamente 60.000 euros. Viajar en estado de ebriedad en un avión está penado con hasta dos años de cárcel y 4.000 euros de multa.
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Otros pasajeros afirmaron que el grupo de la despedida de soltero estaba “completamente bebido” y había consumido alcohol duty-free en la sala de embarque antes de abordar, hasta el punto de que algunos “apenas podían mantenerse en pie” antes del despegue.
Tras el desalojo de los hombres, el vuelo partió finalmente del aeropuerto de Toulouse-Blagnac a las 22:15 y prosiguió hacia su destino original, Alicante.
Un portavoz de Ryanair declaró: “Este vuelo desde Londres-Luton a Alicante fue desviado a Toulouse después de que varios pasajeros alteraran el normal desarrollo del vuelo. La tripulación solicitó la intervención de la policía, que recibió al avión a su llegada al aeropuerto de Toulouse y desembarcó a estos pasajeros antes de que el vuelo regresara a su destino original.”
La aerolínea añadió que tiene una “política de tolerancia cero ante comportamientos inaceptables” y que continuará tomando “medidas estrictas” para abordar dichos incidentes. Se desconoce si Ashley-Laws o alguno de su grupo enfrentará cargos por lo sucedido.
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