Barcelona se dispone a eliminar progresivamente los servicios de taxi mediante aplicación, como Uber y Cabify, conocidos como VTC en España, en una medida que prioriza los taxis tradicionales en la ciudad catalana.
El anteproyecto de la nueva “Ley del Taxi”, al que ha tenido acceso el diario El País, podría suponer la desaparición de hasta mil VTC urbanos que actualmente operan en el área metropolitana de Barcelona a medida que sus licencias vayan expirando.
La nueva norma regula el transporte en vehículos de hasta nueve plazas y divide los VTC en varios servicios: VTC clásicos, “vehículos de alta disponibilidad” y limusinas.
Las reformas también implementarán requisitos mínimos de lengua catalana para los conductores de taxi.
En España, VTC se utiliza para denotar los servicios de reserva mediante aplicación y significa vehículo de transporte con conductor, a diferencia de los taxis tradicionales que se paran en la calle.
La Generalitat estima que 600 licencias urbanas expirarán si el anteproyecto entra en vigor, aunque la intención es realizar una “transición suave” mediante otras 300 que continuarán operando en cumplimiento de resoluciones judiciales hasta que también caduquen.
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El nuevo texto también incluye una plataforma de datos que utilizará tecnología de geolocalización para monitorizar taxis y VTC en busca de irregularidades.
El anteproyecto será registrado este jueves en el Parlamento de Cataluña.
El País describe el proceso mediante el cual se producirá la eliminación progresiva de los VTC: “implica la reducción progresiva de los VTC otorgándoles únicamente autorizaciones cortas (dos años), que no se renovarán automáticamente, no serán transferibles y -en definitiva- desaparecerán a medida que expiren. Si estas limitaciones no fueran suficientes, la Generalitat de Catalunya se reserva el derecho de no renovar las licencias si considera que no cumplen con los criterios ecológicos o ambientales”.
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El Sindicato Libre de Trabajadores (SLT) de conductores de VTC ha afirmado que la nueva ley hará desaparecer el 70 por ciento de las licencias VTC en la ciudad. Actualmente hay 990 licencias en el área metropolitana y, si las predicciones del SLT son exactas, quedarían únicamente 297.
En la actualidad, en Barcelona y su área metropolitana hay 10.500 licencias de taxi y 990 licencias VTC urbanas, según informa la prensa catalana.
El nuevo marco jurídico también exige que tanto los conductores de taxi como de VTC posean un nivel mínimo de catalán de B1. Los conductores en activo disponen de dos años para cumplir este requisito.
Asimismo, estipula que los conductores no podrán haber sido condenados por homicidio, lesiones, delitos contra la libertad sexual o contra el patrimonio.