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El Ayuntamiento de Banyalbufar está poniendo fin a las restricciones nocturnas de agua, pero mantendrá otras restricciones, como llenar piscinas, regar jardines y limpiar terrazas y coches con agua de la red municipal.
La decisión de poner fin a las restricciones nocturnas sigue lo que el ayuntamiento considera “el aumento inesperado y considerable” de agua en el embalse de Font de la Vila. También se ha realizado un “seguimiento exhaustivo del consumo excesivo y posibles fugas de agua”.
Se sigue instando al consumo responsable. Hay un uso máximo de 75 litros por persona al día. Si se excede esta cantidad, los medidores serán sellados y se tendrán que reintroducir restricciones.
Con la temporada turística comenzando, se recuerda a hoteles y propietarios de alquileres turísticos la obligación de informar a los huéspedes sobre las restricciones y hacer que estos huéspedes sean “corresponsables” de la situación del agua. Uno de los hoteles de Banyalbufar es Son Bunyola de Richard Branson.
Banyalbufar tuvo problemas repetidos con el suministro de agua el verano pasado, al igual que ciertos otros municipios en la Sierra de Tramuntana.
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