Un sobrino del Presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, que estuvo en el centro de un escándalo de un vídeo sexual el año pasado, fue condenado a ocho años de prisión por malversación de fondos.
Baltasar Ebang Engonga, el exjefe de la Agencia Nacional de Investigación Financiera, desvió dinero para uso personal, según dictaminó un tribunal.
Apodado “Bello” por su atractivo físico, el casado Engonga ganó notoriedad el año pasado cuando apareció en vídeos filtrados teniendo relaciones con diferentes mujeres, muchas de ellas esposas y parientes de personas cercanas al centro de poder.
La filtración ocurrió mientras él estaba detenido, acusado de depositar una gran suma de dinero malversado en cuentas secretas en las Islas Caimán.
Fue declarado culpable junto con otros cinco funcionarios que supuestamente reclamaron el dinero como viáticos para viajes; los montos oscilaron entre $9,000 y $220,000 dólares.
El arresto de Engonga en octubre pasado y su humillación pública fueron vistos como un intento de destruir cualquier esperanza que tuviera de convertirse en el próximo presidente del rico estado petrolero africano.
Su tío es el presidente que más tiempo ha estado en el poder en el mundo, desde 1979, y ha designado a su hijo, Teodoro Obiang Mangue, como su vicepresidente.
Engonga solía investigar delitos como el lavado de dinero, pero terminó en la infame prisión de Playa Negra en la capital, Malabo, después de ser acusado de corrupción.
Sus teléfonos y computadors fueron incautados y unos días después los vídeos íntimos comenzaron a aparecer en línea por decenas.
La autenticidad de los vídeos nunca se verificó, pero como el equipo informático estaba en manos de las fuerzas de seguridad, se sospechó que alguien de allí los filtró, quizás para dañar la reputación de Engonga.
Además de imponerle una sentencia de cárcel, el tribunal multó a Engonga con $220,000 dólares, según dijo Hilario Mitogo, director de prensa del tribunal supremo, en un mensaje de WhatsApp a periodistas citado por la agencia AFP.