La ciudad de Pokrovsk, que antes era un centro logístico y cultural muy importante, ahora está al borde del colapso total. A través de testimonios directos, podemos observar no solo la destrucción física brutal de la guerra, sino también la eliminación completa de la dignidad humana. Desde mediados de 2024, los residentes y las autoridades ucranianas han estado sacando todo lo que tiene valor del pueblo fronterizo de Pokrovsk: libros de bibliotecas, camas de hospital, equipos industriales… todo lo que una vez sostuvo a una próspera población de más de 60.000 personas en el corazón del Donbas, una región mayormente rusohablante del este de Ucrania. La corresponsal de guerra internacional Anna Conkling se une a Gavin Lee y afirma que “estos podrían ser los últimos días de Pokrovsk bajo control ucraniano”.
