Australia rechaza acción contra Irán tras “intromisión” de Netanyahu de Israel

Australia rechazó la afirmación de que intervenciones israelíes llevaron al gobierno del Primer Ministro Anthony Albanese a expulsar al embajador de Irán en Canberra. Esto pasó después de que el premier culpase a Teherán de dirigir ataques antisemitas en Sydney y Melbourne.

“Completo disparate”, dijo el Ministro de Asuntos Internos australiano, Tony Burke, a la ABC Radio este miércoles, cuando se le preguntó sobre si Israel se atribuyó el mérito de la decisión de Australia de ordenar la salida del embajador iraní, Ahmad Sadeghi.

Albanese dijo el martes que Australia había llegado a “una conclusión profundamente perturbadora” a través de “inteligencia creíble” que encontró que el gobierno iraní había “dirigido” al menos dos ataques contra la comunidad judía de Australia.

Al responder una pregunta de la ABC sobre las acusaciones de Australia contra Irán, el portavoz del gobierno israelí, David Mencer, elogió a Australia por tomarse “en serio las amenazas” contra la comunidad judía, lo cual, según él, ocurrió después de una “intervención franca” del Primer Ministro israelí Benjamin Netanyahu.

Mencer dijo que Netanyahu había “hecho comentarios muy francos sobre el [primer ministro australiano] mismo”, lo que impulsó a Albanese a actuar.

“Hizo esos comentarios porque no creía que las acciones del gobierno australiano hubieran ido lo suficientemente lejos para abordar los problemas de antisemitismo”, añadió Mencer.

La ABC incluyó los comentarios de Mencer en un artículo titulado: “El gobierno israelí se atribuye el mérito de presionar a Albanese para que expulse a diplomáticos iraníes”.

Netanyahu acusó la semana pasada a Albanese de ser “un político débil que traicionó a Israel y abandonó a los judíos de Australia”, días después de que Albanese anunciara que Australia avanzaría para reconocer formalmente un estado palestino en septiembre.

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Irán dijo que “rechazaba absolutamente” las acusaciones de Australia sobre los ataques y señaló que las afirmaciones llegaron después de que Australia dirigiera “críticas limitadas” a Israel.

“Parece que esta acción se toma para compensar las críticas limitadas que el lado australiano ha dirigido al régimen sionista [Israel]”, dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Esmaeil Baghaei.

“Cualquier acción inapropiada e injustificada a nivel diplomático tendrá una reacción reciproca”, dijo Baghaei.

Ilana Lenk, la portavoz y jefa de diplomacia pública de la embajada de Israel en Canberra, compartió portadas de periódicos australianos con titulares como “Irán nos ataca” e “Irán apunta a la delicatessen de Bondi”, en una publicación en redes sociales.

“Advertimos que Irán no se detendría con Israel o el pueblo judío. ‘Occidente es el siguiente’ no es solo un eslogan, y hoy Australia lo ve”, escribió.

En un comunicado, el Consejo Judío de Australia dijo que estaba “conmocionado al saber de la participación del gobierno iraní en la coordinación de ataques antisemitas”.

“El hecho de que un gobierno extranjero parezca ser responsable muestra lo irresponsable que fue que los ataques se usaran para demonizar el movimiento de protesta por la solidaridad con Palestina”, dijo el consejo en un comunicado.

“Llamamos a los políticos y a los medios a actuar con cautela y evitar la politización de estos ataques de una manera que pueda dañar aún más a la comunidad judía”, añadió el comunicado.