El club israelí Maccabi Tel Aviv ha dicho que no venderá entradas a sus hinchas para el partido de la Europa League en Villa Park.
El grupo de seguridad local decidió la semana pasada prohibir que los hinchas visitantes asistan al partido contra el Aston Villa el 6 de noviembre. Esto pasó después de una evaluación de riesgo de la policía de West Midlands.
Esta decisión recibió críticas inmediatas de políticos, incluso del Primer Ministro Sir Keir Starmer.
Después de las quejas, el gobierno del Reino Unido dijo el viernes que está explorando qué “recursos y apoyo adicionales se necesitan” para permitir que “todos los hinchas” puedan asistir.
Sin embargo, Maccabi publicó un comunicado confirmando que no venderán entradas a sus seguidores: “El bienestar y la seguridad de nuestros hinchas es lo más importante. Por lecciones aprendidas en el pasado, hemos tomado la decisión de rechazar cualquier entrada ofrecida para los hinchas visitantes. Nuestra decisión debe entenderse en ese contexto.
“Esperamos que las circunstancias cambien y esperamos poder jugar en Birmingham en un ambiente deportivo pronto.”
El comunicado cuestionó los motivos de los que intentan justificar la prohibición.
“Reconocemos los esfuerzos del gobierno británico y la policía para garantizar que ambos grupos de hinchas puedan asistir al partido con seguridad, y estamos agradecidos por los mensajes de apoyo de toda la comunidad futbolística y la sociedad en general,” dijo el club.
“Nuestro equipo principal tiene jugadores musulmanes, cristianos y judíos, y nuestra hinchada también cruza la división étnica y religiosa. También hemos trabajado mucho para eliminar el racismo dentro de los elementos más extremos de nuestra hinchada.
“Está claro que varios grupos con ideas fijas buscan dañar la imagen de la hinchada del Maccabi Tel Aviv, la mayoría de los cuales no tienen nada que ver con el racismo o el gamberrismo de ningún tipo, y están explotando incidentes aislados para sus propios fines sociales y políticos.
“Como resultado de las mentiras llenas de odio, se ha creado un ambiente tóxico, lo que pone en duda la seguridad de nuestros hinchas que desean asistir.”
El derbi de Tel Aviv entre los rivales Hapoel y Maccabi fue cancelado el domingo después de choques violentos entre hinchas. La policía dijo que 12 personas y tres oficiales resultaron heridos. Después de los disturbios, el diputado independiente por Birmingham Perry Barr, Ayoub Khan, describió a los hinchas del Maccabi como “gamberros, gente que no muestra misericordia” y exigió que el Primer Ministro Sir Keir Starmer se disculpara por sus críticas a la prohibición.
El lunes por la mañana, la Secretaria de Cultura, Lisa Nandy, dijo que la decisión de prohibir a los hinchas “elige la exclusión” de las personas judías.
En respuesta a una pregunta urgente en la Cámara de los Comunes del ex ministro de Deportes Nigel Huddleston, Nandy dijo que la decisión final debe ser tomada por la policía.
Sin embargo, dijo que el país “debería estar horrorizado” de que la evaluación de riesgo inicial se basara, según ella, “en gran parte en el riesgo para esos hinchas que asisten y apoyan a Maccabi porque son israelíes y porque son judíos”.
Añadió: “La solución que se propone, excluir a un grupo, es incorrecta. Elige la exclusión en lugar de observar todas las opciones disponibles para manejar ese riesgo. Esto es sobre quiénes somos como país.”
La policía de West Midlands clasificó la semana pasada el partido como de “alto riesgo”. Dijeron que la decisión se basó “en inteligencia actual e incidentes anteriores, incluyendo choques violentos y delitos de odio que ocurrieron durante el partido de la UEFA Europa League 2024 entre el Ajax y el Maccabi Tel Aviv en Ámsterdam”.