Hoy, martes 4 de noviembre, se inauguró en Londres la Feria Mundial de Turismo (WTM) —el equivalente en la industria turística a la final de la Champions League—, un escaparate crucial para un sector que representa más del 15% del PIB de Alicante.
Los destinos de la provincia de Alicante han perfeccionado sus estrategias turísticas para atraer aún más visitantes del Reino Unido —un mercado que ya aporta más de tres millones de turistas y más del 30% de las pernoctaciones en la región. Y los líderes del sector consideran que aún hay margen de crecimiento.
Los números hablan por sí solos.
El año pasado, tres millones de turistas británicos visitaron Alicante. Uno de cada tres pasajeros en el Aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández portaba un pasaporte del Reino Unido. En Benidorm, representaron casi la mitad de todas las pernoctaciones.
Los datos actualizados de 2025 muestran que, de los 15,3 millones de usuarios del aeropuerto, más de cinco millones eran británicos. Entre enero y julio, 1,6 millones de visitantes británicos realizaron 11,3 millones de pernoctaciones con una duración media de 5,4 días, según cifras de la Oficina de Turismo de la Costa Blanca.
“El mercado británico sigue siendo la columna vertebral de nuestra economía turística”, afirma José Mancebo, director de la Diputación de Turismo. “El próximo año seguiremos trabajando para fortalecer el valor percibido y mantener la conectividad aérea con más de veinte aeropuertos británicos. No se trata de competir por precio, sino por la calidad de la experiencia”.
La desestacionalización del turismo sigue siendo una prioridad máxima. Fede Fuster, presidente de la asociación hotelera Hosbec, estima que el mercado británico genera más de 3.000 millones de euros anuales y juega un papel vital para alargar la temporada turística. “Aproximadamente la mitad de las reservas británicas se realizan a través de tour operadores”, señala, “lo que nos da una base sólida, pero también margen para crecer”.
No obstante, Leire Bilbao, gerente de Visit Benidorm, puntualiza que las agencias de viajes online se han convertido en actores clave. “Tras la pandemia, los viajeros buscaban garantías: salidas confirmadas, cancelaciones cubiertas y confianza en el servicio. Por eso las OTAs han proliferado”.
En el Aeropuerto de Alicante-Elche, las previsiones respaldan el optimismo. La directora Laura Navarro confirma que el mercado británico será fundamental para la próxima expansión aeroportuaria. “Dada su envergadura, la nueva manga de embarque incluirá un área centralizada de control fronterizo para gestionar de forma eficiente el futuro tráfico extra-Schengen”, explica.
Hasta ahora, los datos de 2025 respaldan la perspectiva positiva: las pernoctaciones de turistas británicos han aumentado en casi todos los segmentos. La Costa Blanca sigue diseñando y ofreciendo experiencias de ocio que fidelizan a los viajeros del Reino Unido —desde escapadas de medio término hasta vacaciones invernales.
Para la nueva temporada de invierno de vuelos, las aerolíneas han incrementado en un 8,8% el número de plazas disponibles entre Alicante y el Reino Unido, ofertando casi 2,6 millones de plazas en 52 rutas —cuatro más que el año pasado. Londres sigue siendo el mercado emisor principal, con un crecimiento interanual del 13,7%, conectando ahora Alicante con 19 ciudades británicas.
Para absorber este aumento, Aena ha introducido sistemas mejorados de control de pasaportes, nuevas salas VIP y personal adicional. “Estamos trabajando estrechamente con la Policía Nacional para garantizar una experiencia fluida”, explica Navarro. “La implantación por fases marcha bien y se prevé que el sistema esté plenamente operativo el 10 de abril”.
Con una conectividad reforzada, nuevas infraestructuras y un renovado enfoque en la calidad, Alicante acudió a la Feria Mundial de Turismo de Londres con la esperanza de asegurar que el idilio británico con la Costa Blanca no solo perdure, sino que se intensifique.