El domingo, el Govern balear declaró la comarca del Pla de Mallorca en alerta por sequía debido a un “empeoramiento generalizado de la situación”. La alerta por sequía es el nivel previo a la emergencia.
Toda Mallorca, junto con Menorca e Ibiza, ya estaban en prealerta por sequía. La revisión para la zona del Pla refleja el estado actual de las reservas hídricas y los problemas específicos de esta región.
A finales de julio, las reservas en Baleares se situaban en un 43%, cinco puntos menos que en junio y tres puntos por debajo de julio de 2024. En Mallorca, concretamente, eran del 46%. Ibiza es la mayor preocupación, con solo un 29% de reservas a finales del mes pasado. Solo Formentera se clasificó como “normal”.
Los municipios afectados por la alerta de sequía son: Algaida, Ariany, Costitx, Lloret, Llubí, Maria de la Salut, Montuïri, Petra, Porreres, Sant Joan, Santa Eugènia, Sencelles, Sineu y Vilafranca.
Los problemas en el Pla, reconocidos desde hace años, se deben en gran medida a que estos municipios no están conectados a la red principal de abastecimiento. Aunque se están realizando obras, Joan Calafat, director general de Recursos Hídricos, ha subrayado recientemente la urgencia de actuar. Montuïri es uno de los municipios más afectados; el ayuntamiento paga el suministro mediante camiones cisterna.
La alerta por sequía llega pese a que este julio ha sido el séptimo más lluvioso desde 1961. La precipitación acumulada en Mallorca supera ligeramente el 100% de la media anual.