Un alcalde de un pueblo del oeste de México fue arrestado como parte de una investigación sobre un presunto campamento de entrenamiento del cartel de drogas donde se encontraron huesos humanos y ropa, dijo un oficial federal.
El alcalde de Teuchitlán, José Murguía Santiago, fue arrestado como parte de una investigación de los fiscales gubernamentales sobre probables omisiones o complicidades de las autoridades con el cartel Jalisco Nueva Generación, dijo una fuente federal a AFP el sábado.
La fuente pidió anonimato porque no estaba autorizada para hablar con los medios.
Murguía fue arrestado el sábado por la tarde, según registros de arresto federales.
El cartel, que la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos dice que tiene alrededor de 19,000 miembros, se desarrolló rápidamente en una fuerza extremadamente violenta y capaz después de separarse del cartel de Sinaloa tras el asesinato en 2010 de Ignacio “Nacho” Coronel Villarreal por el ejército.
El “rancho del horror”, como lo llamaron algunos medios locales, en el Rancho Izaguirre en Teuchitlán en el estado occidental de Jalisco, fue descubierto por primera vez en septiembre de 2024. Seis meses después, personas que buscaban familiares desaparecidos encontraron ropa y restos humanos, lo que planteó preguntas sobre la investigación inicial, incluida una falla en la búsqueda exhaustiva del sitio.
Human Rights Watch lo llamó un “aparente sitio de matanza masiva”.
El cartel presuntamente usaba el rancho para entrenar a pistoleros recién reclutados, han dicho altos funcionarios.
El colectivo Guerreros Buscadores, un grupo dedicado a localizar familiares desaparecidos, ha descrito el rancho de Teuchitlán como un “centro de exterminio” con “crematorios clandestinos” donde se cree que el cartel mantenía reclutas forzados.
El ministro de Seguridad, Omar García Harfuch, dijo a los periodistas a fines de marzo que no había “evidencia de que fuera un campo de exterminio”.
Pero también dijo que un presunto reclutador, que fue arrestado, dijo que los miembros del cartel torturaban y mataban a los reclutas que se negaban a cooperar o intentaban escapar.
La fiscalía, que ha negado que las ejecuciones se llevaran a cabo sistemáticamente, se hizo cargo de la investigación después de una denuncia de Guerreros Buscadores.
El grupo encontró huesos enterrados, ropa, zapatos y otros objetos en el rancho, que pasaron desapercibidos durante una búsqueda en septiembre por parte de las autoridades que lo allanaron tras informes de disparos.
Según la fiscalía del estado de Jalisco, se arrestaron a 10 personas, se liberaron a dos cautivos y se encontró un cadáver junto con restos humanos en septiembre.
Además del alcalde Murguía, unas docenas de personas más han sido arrestadas en el caso, incluido un jefe de policía de un municipio vecino y dos de sus agentes.
Más de 127,000 personas están registradas como desaparecidas en México, la mayoría de ellas desde 2006 cuando el gobierno declaró la guerra a los grupos de narcotráfico.
Por estado, Jalisco tiene el mayor número de casos de personas desaparecidas, con más de 15,000.