La Asociación de Líneas Aéreas (ALA) ha solicitado una reducción de los cargos aeroportuarios españoles para el próximo periodo regulatorio quinquenal, entre 2027 y 2031, alegando el incremento sostenido del tráfico aéreo y los buenos resultados de la autoridad aeroportuaria Aena en los últimos años. Javier Gándara, presidente de ALA, explicó este miércoles en rueda de prensa que ya ha comenzado el periodo de consulta del tercer Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA III). Dicho documento regulará el lustro comprendido entre 2027 y 2031, periodo durante el cual abogarán por una tendencia a la baja en las tasas con el fin de impulsar el crecimiento del tráfico.
La asociación considera que la disminución de las tarifas aeroportuarias no contradice los planes de Aena de invertir 10.000 millones de euros para expandir y modernizar sus aeropuertos, máxime dada la eficiencia operativa del gestor aeroportuario. Asimismo, Gándara ha subrayado que las ‘condiciones de eficiencia’ que han posibilitado contener los cargos aeroportuarios deberían prorrogarse, ‘lo que ha generado un círculo virtuoso hasta la fecha, permitiendo a Aena alcanzar beneficios récord, distribuir dividendos entre sus accionistas e incrementar el tráfico, algo que es “positivo para todos”’.
No obstante, Aena sostiene que sus cargos aeroportuarios se encuentran entre los más competitivos de Europa y así seguirá siendo a pesar del incremento del 6,5% propuesto para 2026, tras años de tasas congeladas. Ryanair, por ejemplo, ha anunciado una reducción significativa de su presencia en los aeropuertos regionales de España, recortando 1,2 millones de plazas en protesta por lo que describe como las “elevadas tasas” impuestas por la gestora aeroportuaria Aena.
Esta medida supondrá la suspensión total de los vuelos con el Aeropuerto de Asturias, mientras que la aerolínea de bajo coste prevé incrementar la capacidad en los grandes aeropuertos del país, incluyendo Palma, Madrid, Barcelona y Málaga, en 600.000 plazas. Esta reducción se suma a una serie de recortes ya implementados en los aeropuertos regionales. El verano pasado, Ryanair suprimió 800.000 plazas, y otro millón adicional fue eliminado para la actual temporada invernal. El impacto total entre 2025 y 2026 ascenderá a tres millones de plazas retiradas de los aeropuertos menores de España.
La aerolínea ha adoptado estas decisiones como parte de su plan para reducir su capacidad en un 41 por ciento en las regiones españolas y en un 10 por ciento en las Islas Canarias este invierno, lo que supondrá la pérdida de un millón de plazas en invierno (dos millones anualizados) ‘debido a los excesivos y poco competitivos cargos aeroportuarios aplicados por el monopolístico gestor aeroportuario Aena’.
Michael O’Leary, consejero delegado de Ryanair, afirmó durante la rueda de prensa de la temporada invernal que estos recortes dañarán aún más a los aeropuertos vulnerables y conducirán a ‘una pérdida de inversión, conectividad, turismo y empleo en la España regional, ya que muchas rutas devendrán económicamente inviables’.
Las aerolíneas han programado un 1,5% menos de plazas en las Baleares para el próximo invierno, según datos de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA). En el conjunto de España, están planificadas 139 millones de plazas para el mencionado periodo, que abarca de octubre de 2025 a marzo de 2026, lo que representa un aumento del 4,7% respecto al mismo periodo del año anterior. Según la asociación, estas ‘buenas previsiones’ y la evolución positiva del tráfico a lo largo del año ‘anticipan la posibilidad de batir un nuevo récord histórico’ este año, aunque el crecimiento se desacelera en comparación con ejercicios anteriores.
En la temporada estival, que comprende de abril a septiembre inclusive, el número de pasajeros ascendió a 183 millones, un 3,6% más que en el mismo periodo del año anterior. El presidente de ALA, Javier Gándara, señaló el miércoles en rueda de prensa que este nuevo récord sería ‘muy positivo’, si bien no es un objetivo que se persiga ‘per se’. ‘Batir el récord indica que la población puede continuar disfrutando de los viajes aéreos’, manifestó.
Ahora bien, Gándara matizó que esta tendencia varía según la región, con casos como Andalucía, donde el incremento es del 7,5%, y Baleares y Galicia, donde los descensos son del 1,5% y 17% respectivamente, estando esta última especialmente afectada por la retirada de Ryanair, sobre lo cual puntualizó que ‘cualquier aerolínea tiene derecho a confeccionar su propia programación según considere oportuno’.
Pese a estos prospectos alentadores, ALA ha identificado diversos factores que podrían afectar al tráfico aéreo en España, como la coyuntura geopolítica y la economía global, así como otras ‘incertidumbres’ vinculadas al sector de la aviación, tales como la senda tarifaria que se establezca en el próximo DORA III o la resolución de las sanciones impuestas por el Ministerio de Consumo a cinco aerolíneas de bajo coste por cobrar por el equipaje de cabina.
El máximo responsable de ALA ha abogado por una trayectoria tarifaria descendente para el DORA III (2027-2031), en línea con la senda mantenida durante gran parte de los dos periodos regulatorios previos, la cual cubriría los 10.000 millones de euros de inversión regulada previstos para dicho lustro y facilitaría el crecimiento del tráfico y la conectividad.
A tal efecto, Gándara recalcó que las ‘condiciones de eficiencia’ que han mantenido a raya las tarifas aeroportuarias en los últimos años deberían extenderse, lo que ha creado un círculo virtuoso hasta ahora, permitiendo a Aena alcanzar ganancias récord, repartir dividendos a sus accionistas e incrementar el tráfico.
‘Las condiciones de eficiencia que han limitado los cargos aeroportuarios deben prolongarse en el tiempo, pues han demostrado ser beneficiosas para todos’, enfatizó, añadiendo que durante dichos periodos, Aena también ha logrado beneficios sin precedentes. Por otra parte, ALA ha manifestado su preocupación por el problema ocasionado por la falta de pago por parte del Gobierno a las aerolíneas que conectan Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla con la península, y que operan vuelos interinsulares, debido a los subsidios para residentes que aún no han sido cubiertos por el Estado.
La Asociación ha advertido que este problema ‘se está agravando rápidamente’ y que, entre enero y agosto de 2025, el monto pendiente de abonar a las aerolíneas que operan estas rutas ascendía a 700 millones de euros, a lo que hay que sumar las deudas acumuladas de 2024. ‘Exigimos que el Gobierno halle una solución lo antes possible a este preocupante problema, que se está agudizando, mermando la liquidez financiera de estas aerolíneas, y sin visos de resolverse hasta que se aprueben unos Presupuestos Generales con financiación suficiente para esta partida’, declaró Gándara, quien teme que la conectividad aérea de las islas se vea afectada si no se resuelve el impasse.