Aviso
Southwest Airlines requerirá próximamente que los viajeros que no quepan dentro de los reposabrazos de su asiento abonen uno adicional con antelación, como parte de una serie de cambios recientes que está implementando la aerolínea.
La nueva normativa entrará en vigor el 27 de enero, el mismo día en que Southwest comenzará a asignar asientos, un cambio radical respecto a su política tradicional, que permitía a los pasajeros elegir sus propios asientos al embarcar.
Actualmente, los pasajeros de talla especial pueden pagar un asiento adicional con antelación y optar a un reembolso posterior, o bien solicitar una plaza adicional sin coste en el aeropuerto. Según la nueva política de la compañía, el reembolso sigue siendo posible, pero ya no está garantizado.
En un comunicado emitido el lunes, Southwest señaló que está actualizando parte de sus políticas de cara a la implementación de la asignación de asientos el próximo año.
“Para garantizar la disponibilidad, nos estamos poniendo en contacto con aquellos clientes que han hecho uso previo de la política de asientos adicionales para recomendarles que los adquieran en el momento de la reserva”, indicó el comunicado.
Southwest se aleja de su antigua identidad
Este cambio supone un punto de inflexión para Southwest, históricamente conocida por permitir que sus pasajeros escogieran su asiento una vez abordado el avión, y por autorizar el transporte de equipaje de mano sin coste adicional —una política que finalizó en mayo—. Estas ventajas eran clave para diferenciar a esta aerolínea low cost de sus competidores.
Southwest ha señalado que, bajo su nueva política, seguirá reembolsando el segundo billete para asientos adicionales si el vuelo no está completo en el momento del despegue, y siempre que ambos billetes se hayan adquirido en la misma clase de reserva. El pasajero deberá solicitar el reembolso en un plazo máximo de 90 días desde la fecha del vuelo.
Si un pasajero que necesita un asiento adicional no lo ha adquirido con antelación, deberá comprarlo en el aeropuerto según la nueva normativa. De estar el vuelo completo, se procederá a reprogramar su viaje en una nueva salida.
Aerolíneas de bajo coste bajo presión en Europa
La medida de Southwest llega en un momento en el que las aerolíneas económicas de todo el mundo están reevaluando —o en algunos casos, se ven forzadas a replantearse— sus modelos de negocio.
En Europa, los reguladores se han centrado en la transparencia y los derechos de los pasajeros. En junio, la UE adoptó una propuesta que otorgará a los viajeros el derecho a llevar un artículo personal y una maleta de cabina de hasta siete kilogramos sin cargo adicional.
Matteo Ricci, vicepresidente del Comité de Transporte y Turismo de la UE y principal impulsor del proyecto de ley, calificó el cambio como un paso hacia un “sistema más justo y equitativo”.
Esta iniciativa forma parte de un esfuerzo más amplio por parte de Bruselas para simplificar la experiencia de vuelo, desde exigir que las aerolíneas muestren el coste total del billete antes de finalizar la reserva, hasta reforzar las normativas sobre compensaciones por cancelación.
No obstante, analistas han advertido que estas nuevas protecciones podrían llevar a las aerolíneas a incrementar las tarifas mediante otras vías, en busca de nuevas fuentes de ingresos.
Asientos de pie, tarifas ocultas y ventajas familiares
Esta presión ya ha propiciado experimentos y prácticas controvertidas.
Aunque su eventual implementación fue descartada, los prototipos de los denominados “asientos de pie” se viralizaron a principios de año, generando una considerable controversia.
Las tarifas ocultas siguen siendo otro punto de fricción para los viajeros, con cargos adicionales que aparecen en conceptos como métodos de pago o reservas grupales.
Un informe de Tradingpedia publicado este año concluyó que, si bien las aerolíneas low cost anuncian precios muy competitivos, la realidad suele ser más compleja. Los recargos por selección de asiento, equipaje o incluso cambios de nombre en la reserva se revelan gradualmente durante el proceso de compra, en lugar de incluirse en el precio inicial.
Sin embargo, no todos los cambios perjudican a los pasajeros.
JET2, con sede en el Reino Unido, anunció recientemente que los menores de dos años volarán gratuitamente, ya sea en paquetes vacacionales o en vuelos regulares. La aerolínea también eliminó los suplementos por equipaje facturado para cochecitos, sillas de auto y otros artículos infantiles.
Preocupación entre viajeros por comodidad y costes
A medida que las aerolíneas ajustan sus políticas, los pasajeros también se preguntan cómo afectarán estos cambios a su comodidad y economía.
Jason Vaughn, agente de viajes radicado en Orlando y creador de contenido sobre experiencias de viajeros de talla grande en redes sociales y su web Fat Travel Tested, opina que el cambio de Southwest probablemente afectará a viajeros de todo tipo de complexiones.
La política anterior de Southwest contribuía a una experiencia de vuelo más cómoda para personas de talla especial, garantizando al mismo tiempo que todos los pasajeros dispusieran de un espacio adecuado en sus asientos.
“Creo que esta nueva norma va a empeorar la experiencia de vuelo para todos”, afirmó.
Vaughn describió el cambio como otra decepción para los clientes leales de Southwest, equiparándolo al reciente cambio de logotipo del restaurante estadounidense Cracker Barrel, que disgustó a muchos de sus seguidores.
“Ya no tienen claro quién es su cliente”, comentó sobre la aerolínea. “Han perdido su identidad.”
La compañía ha atravesado dificultades recientes y está bajo presión por parte de inversores activistas para mejorar sus beneficios e ingresos. El año pasado también anunció que incrementaría el precio de los asientos con más espacio para las piernas y que ofrecería vuelos en horarios de madrugada.