Ryanair pidió hoy (lunes, 16 de junio) a la Comisión Europea que exija a los proveedores de control de tráfico aéreo (ATC) en Francia, España, Alemania, Grecia y el Reino Unido, responsables de la mayoría de los retrasos, que doten adecuadamente de personal sus centros para eliminar demoras evitables. El bajo rendimiento de estos ATC mal gestionados contrasta con el desempeño ejemplar de otros servicios en Dinamarca, Bélgica, Países Bajos, Irlanda y Eslovaquia, que en 2024 han brindado servicios puntuales a miles de vuelos, sin desajustes de personal o retrasos por "capacidad" evitable.
Ryanair lleva años abogando por una reforma urgente de los servicios ATC europeos, pero, pese a 20 años de inversión en SESAR (el fallido "Cielo Único Europeo"), no se ha avanzado. La nueva Comisión de Ursula von der Leyen prometió competitividad y eficiencia, pero sigue tolerando la mala gestión y la escasez de personal en los ATC de Francia, España, Alemania, Grecia y el Reino Unido.
Michael O’Leary, de Ryanair, declaró: "Si daneses, belgas, neerlandeses, irlandeses y eslovacos pueden operar sus ATC sin retrasos por ‘capacidad’, ¿por qué no exijir lo mismo a los ATC francés, español, alemán, griego y británico, bien financiados (por aerolíneas) pero pésimamente gestionados? La diferencia es que son monopolios estatales protegidos que no les importa el servicio al cliente, los pasajeros ni las aerolíneas. Cada año faltan controladores y causan +90% de los retrasos en Europa, aumentando las emisiones un 10%."
"Este escándalo de desorganización ya no es tolerable. La Comisión debe intervenir y exigir servicios ATC eficientes y competitivos en toda Europa. Ryanair, nuestros clientes y pasajeros estamos hartos de retrasos evitables cada verano por culpa de franceses, alemanes, españoles, griegos y británicos. Basta con contratar y formar controladores, como ya hicieron irlandeses, daneses, neerlandeses, belgas y eslovacos."
"Es hora de acabar con esta incompetencia o abrir los ATC de Francia, Alemania, España, Grecia y el Reino Unido a la competencia. Europa debe permitir que la competencia logre lo que los monopolios estatales fracasaron. Si otros lo han conseguido, ¿por qué ellos no?"