Alfonso Rodríguez, presidente de la asociación de consumidores Consubal, denuncia que “muchos propietarios están extorsionando a sus inquilinos”.
Señalando casos de arrendadores que ahora alquilan habitaciones en vez de viviendas completas, Rodríguez afirma que se está “deshauciando” a inquilinos por “subidas desorbitadas”, a pesar de que los contratos no hayan vencido, “algo completamente ilegal”. “Los inquilinos se marchan por miedo y por desconocimiento de la normativa. Los propietarios amenazan con llamar a la policía si no abandonan el piso.”
“Muchos pequeños propietarios en Mallorca se han convertido en mini-especuladores.” Pone el ejemplo de un piso de tres dormitorios en Son Oliva (Palma). El alquiler mensual es de 900 euros. “Pero el propietario impone al inquilino un aumento descomunal para forzar su salida, y una vez lo consigue, empieza a alquilar por habitaciones, llegando a dividir el salón y poniendo cinco habitaciones en el mercado de alquiler. Si las alquila a 600 euros mensuales, ingresa 3.000 euros.”
Rodríguez explica que cuatro de cada cinco denuncias presentadas en Consubal tienen que ver con la vivienda. “El alquiler no puede subir por encima del IPC si el contrato está vigente; es ilegal.” Insta a los afectados a emprender acciones legales y apunta que los más perjudicados por estas prácticas son los jóvenes inmigrantes. “El propietario les dice que les subirá el alquiler 300 o 400 euros, lo cual no puede hacer porque el contrato sigue vigente. Si no lo aceptan, tendrán que irse o se llamará a la policía. Es ilegal y deplorable.”
Otro problema frecuente es que “muchos arrendadores se niegan a devolver la fianza cuando el inquilino se marcha, alegando motivos completamente injustificados”. Anima a los afectados a acudir a Consubal, donde les redactarán gratis una demanda para presentar en los juzgados. “Ni siquiera necesitan abogado. La via judicial es la única solución.”
Rodríguez considera que la política de vivienda del Govern balear no está ayudando. “Los programas del gobierno no están dando los resultados prometidos. Al contrario, el acceso a la vivienda es cada vez más difícil.” Pide al ejecutivo que declare toda Balears “zona tensionada”. Este es el mecanismo de la ley de vivienda española que permite aplicar límites al alquiler. Sostiene que los precios del alquiler en Cataluña han bajado gracias a esta política, aunque no tanto como se preveía.