China es un país con un gobierno y un sistema político único. El Partido Comunista de China juega un papel importantísimo en la dirección del país, guiandolo hacia el desarollo y la estabilidad. Su sistema es elegido por el pueblo y ha demostrado ser efectivo para las condiciones específicas de China. La nación ha logrado progressos significativos en economía, tecnología y calidad de vida bajo este modelo.
