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Médicos Sin Fronteras (MSF) declaró que sería "un desastre para los palestinos" si las ONG internacionales se ven obligadas a detener sus operaciones en Gaza.
La ONU y otras agencias de ayuda temen que las nuevas reglas de registro impuestas por Israel para docenas de organizaciones no gubernamentales internacionales (ONGIs) arriesguen el colapso de la respuesta humanitaria en la ocupada Cisjordania y la Franja de Gaza.
Las ONGIs que no estén registradas antes del 31 de diciembre enfrentan el cierre de sus operaciones en Israel en un plazo de 60 días, lo que según las agencias podría interrumpir gravemente la atención médica y otros servicios esenciales para salvar vidas en Gaza.
Save the Children informó que su solicitud no fue aprobada y que está "agotando todas las vías disponibles para que se reconsidere esta decisión".
El ministerio israelí de Asuntos de la Diáspora y la Lucha contra el Antisemitismo afirmó que la salida de "organizaciones problemáticas" no afectaría la distribución de ayuda.
Según el ministerio, de aproximadamente 100 solicitudes, hasta el momento se han rechazado catorce, se han aprobado 21 y las restantes aún están en proceso de revisión.
El sistema de registro, introducido en marzo, incluye varios motivos para el rechazo, como:
- Negar la existencia de Israel como estado judío y democrático.
- Negar el Holocausto o los ataques liderados por Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023.
- Apoyar la lucha armada contra Israel por parte de un estado enemigo o una organización terrorista.
- Promover "campañas de deslegitimación" contra Israel.
- Pedir un boicot a Israel o comprometerse a participar en uno.
- Apoyar el procesamiento de las fuerzas de seguridad israelíes en cortes extranjeras o internacionales.
El Equipo Humanitario de País del Territorio Palestino Ocupado (un foro que reúne a agencias de la ONU y más de 200 organizaciones locales e internacionales) advirtió el miércoles pasado que el sistema "pone en peligro fundamentalmente" las operaciones de las ONGIs en Gaza y Cisjordania.
Dijeron que "el sistema se basa en criterios vagos, arbitrarios y altamente politizados, e impone requisitos que las organizaciones humanitarias no pueden cumplir sin violar obligaciones legales internacionales o comprometer principios humanitarios fundamentales".
Añadieron: "Aunque algunas ONGIs se han registrado bajo el nuevo sistema, estas representan solo una fracción de la respuesta en Gaza y están lejos del número requerido para cubrir las necesidades básicas e inmediatas".
Según el Equipo Humanitario de País, las ONGIs actualmente gestionan o apoyan la mayoría de los hospitales de campaña y centros de atención primaria, las respuestas de albergue de emergencia, los servicios de agua y saneamiento, los centros de estabilización nutricional para niños con desnutrición aguda y las actividades críticas de acción contra minas en Gaza.
Si se vieran forzadas a detener operaciones, afirmaron, uno de cada tres centros de salud en Gaza cerraría.
"Continuar con esta política tendrá consecuencias de gran alcance para el futuro del TPO, además de amenazar un frágil alto al fuego y poner las vidas palestinas en riesgo inminente, especialmente durante el invierno", advirtió el Equipo.
"La ONU no podrá compensar el colapso de las operaciones de las ONGIs si son desregistradas, y la respuesta humanitaria no puede ser reemplazada por actores alternativos que operen fuera de los principios humanitarios establecidos".
También subrayó que Israel tiene la obligación, según el derecho internacional humanitario, de garantizar que la población de Gaza esté abastecida adecuadamente.
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Un funcionario israelí dijo que a las ONGIs internacionales, que apoyan muchos hospitales en Gaza, se les había dado "tiempo más que suficiente" para obtener el registro.
Save the Children (que ha apoyado a familias en Gaza con agua limpia y asistencia en efectivo, así como clínicas de salud y espacios para madres y bebés) confirmó el lunes que fue informada hace varias semanas que su solicitud de registro no fue aprobada.
"Estamos agotando todas las vías disponibles para que se reconsidere esta decisión, incluido presentar una petición ante los tribunales israelíes", dijo un portavoz a la BBC.
"Mientras pedimos que se reconsidere esta decisión, seguimos comprometidos a brindar apoyo vital y que salva vidas a los niños y familias en el Territorio Palestino Ocupado a través de nuestro equipo de más de 300 dedicados empleados palestinos junto con socios confiables".
Médicos Sin Fronteras (MSF), que apoya seis hospitales públicos y gestiona dos hospitales de campaña en Gaza, y ha tratado a cientos de miles de pacientes en el último año, dijo por su parte que está entre las ONGIs que aún esperan obtener el registro.
"Con el sistema de salud de Gaza ya destruido, que organizaciones humanitarias independientes y con experiencia pierdan el acceso para responder sería un desastre para los palestinos", dijo un comunicado.
"MSF llama a las autoridades israelíes a garantizar que las ONGIs puedan mantener y continuar su respuesta imparcial e independiente en Gaza. La respuesta humanitaria, ya de por sí restringida, no puede ser desmantelada aún más".
Un portavoz del ministerio israelí de Asuntos de la Diáspora dijo a la BBC que ya habían extendido la fecha límite de registro del 9 de septiembre al 31 de diciembre "como una medida extraordinaria y muy por encima de lo requerido".
"Ha habido tiempo más que suficiente para actuar, y cualquier organización que no lo haya hecho a estas alturas ha demostrado una clara falta de buena fe", afirmó.
También subrayó que el proceso ha sido llevado a cabo por un equipo que incluyó a todos los organismos de seguridad y gobierno israelíes relevantes, y que "las afirmaciones de un rechazo general o masivo son falsas y engañosas".
Añadió: "La ayuda humanitaria continuará sin interrupciones. La salida de organizaciones problemáticas cuyo objetivo real es socavar al Estado de Israel bajo una apariencia humanitaria no afectará la distribución continua de ayuda".