Billund, Dinamarca – Millones de personas en todo el mundo reconocen al instante la apariencia, la sensación – especialmente bajo el pie – e incluso el sonido de LEGO. Estos bloques de plástico han formado los recuerdos de infancia de generaciones.
En la sede de la compañía en Dinamarca, décadas de esas experiencias se conservan en un museo secreto al que solo pueden acceder los empleados de LEGO. Sin embargo, CBS News pudo ver excepcionalmente ese museo poco conocido, donde fue posible rastrear la evolución de uno de los juguetes más reconocibles y queridos del mundo.
El museo se encuentra junto a la casa original del fundador de LEGO, Ole Kirk Kristiansen – un recordatorio de los humildes comienzos del gigante de los juguetes. El nombre de la marca refleja su filosofía: “LEGO” proviene de la frase danesa “leg godt”, que significa “jugar bien”.
Dentro del museo hay algunos de los primeros ladrillos LEGO, incluyendo piezas que se remontan a los años 1950. Entre las primeras creaciones que allí se guardan está el primer “sistema” LEGO que se construyó – un pequeño pueblo que sentó las bases de todo lo que la empresa construiría después.
Ese sistema —la idea de que cada ladrillo LEGO, sin importar cuándo fue hecho, puede conectarse— data de 1955, cuando la compañía armó esa primera ciudad de juego. A lo largo de las décadas, las creaciones de LEGO han evolucionado desde pueblos medievales hasta asombrosas proezas arquitectónicas.
La colección incluye sets vintage que siguen funcionando como fueron diseñados, muchas décadas después, como un castillo con puente levadizo operativo de los años 1970. Pero la evolución tampoco ha faltado. Desde los primeros diseños, las construcciones de LEGO se han vuelto cada vez más ambiciosas y sofisticadas.
Junto a los clásicos, el museo exhibe creaciones complejas que van desde miniaturas de monumentos icónicos como la Torre Eiffel hasta ramos de flores de LEGO. Otras piezas han evolucionado de las propias submarcas de LEGO. Muchos padres de hoy, por ejemplo, reconocerán los ejércitos de pequeños personajes de la moderna serie de televisión infantil de superhéroes fantásticos, Ninjago.
Dentro de la Casa LEGO
CBS News también pudo echar un vistazo al interior de LEGO House, un monumento al juguete de casi 12.000 metros cuadrados, lleno con unos 25 millones de ladrillos LEGO, incluyendo los más de 6 millones que forman el impresionante “Árbol de la Creatividad”. Con casi 15 metros de altura, es la construcción de LEGO más grande conocida del mundo. Cada rama está llena de detalles, un verdadero festín para la vista.
Detrás de todas estas creaciones está el propio ejército interno de creativos de LEGO.
“Hay alrededor de 700 diseñadores aquí”, dijo André Doxey, el primer Jefe de Diseño estadounidense del Grupo LEGO, a CBS News.
Doxey afirmó que la creatividad, no la habilidad técnica, ha sido clave para el atractivo perdurable de LEGO.
“No tienes que ser un diseñador”, dijo. “Solo tienes que ser valiente, creativo y curioso, y intentarlo”.
Doxey cree que la notable popularidad duradera de LEGO se debe en gran parte a la libertad que ofrece.
“Sabemos que a la gente le encanta crear, a los niños les encanta crear”, dijo. “Nuestro sistema es un medio creativo. Les permite imaginar cualquier cosa que quieran imaginar”.
LEGO: No solo para niños — pero principalmente para niños
Y LEGO ha descubierto que su atractivo se extiende mucho más allá de la infancia. La nostalgia juega un papel poderoso en la compañía, y los llamados AFOLs (Adult Fans of LEGO – Adultos Fanáticos de LEGO) representan un mercado significativo y en crecimiento.
Pero el Maestro de Diseño Milan Madge conoce bien al público, y aunque no niega la creciente popularidad de las construcciones más complejas para adultos, dijo que los niños siguen siendo la prioridad de la empresa.
“Ellos son nuestra primera inspiración”, dijo. “Intentamos actuar como niños y ver el mundo a través de sus ojos”.
Aunque los diseños modernos a menudo se crean digitalmente para agilizar la producción, Madge comentó que aún prefiere trabajar con ladrillos físicos.
“Hay una conexión real entre la mente y el proceso creativo cuando trabajas con las manos”, explicó.
Esa simple conexión táctil —ladrillo a ladrillo— ha ayudado a convertir a LEGO en la empresa de juguetes con mayores ingresos del mundo. Las familias construyen juntas. Los amigos se reúnen alrededor de creaciones compartidas. Se forman comunidades, unidas por el sonido de los ladrillos al sacudirse en una caja.
“Todo el mundo conoce ese sonido”, dijo Doxey a CBS News. “Lo agitas y sabes exactamente lo que es”.
Un juguete querido, con un problema de plástico
Sin embargo, más allá de toda la creatividad y la nostalgia, el Grupo LEGO también lidia con un problema fundamental en un mundo que enfrenta lo que la mayoría de los científicos llama una crisis climática: el imperio de la compañía todavía está construido casi en su totalidad con plástico, y uno de los componentes clave de la mayoría de los plásticos son los combustibles fósiles.
Cada tonelada de LEGO producida requiere aproximadamente dos toneladas de productos petroquímicos en el proceso de fabricación, según la plataforma global de información y datos de sostenibilidad, illuminem. LEGO fabrica aproximadamente 60.000 millones de ladrillos al año, y según los datos de illuminem, algunos de los sets más grandes de la empresa requerirían el equivalente a más de 27 kilogramos de petroquímicos para producirse.
A pesar de ambiciosas promesas climáticas, la empresa hasta ahora no ha encontrado un camino sostenible para sus juguetes.
LEGO abandonó una iniciativa de “botellas a ladrillos” en 2023 después de descubrir que el material reciclable que esperaba usar, de hecho, aumentaría las emisiones en comparación con sus materiales actuales.
“Los ladrillos LEGO están hechos para niños, por lo que deben cumplir estándares de calidad y seguridad extremadamente altos”, dijo la compañía a CBS News en un comunicado. “También deben ser duraderos, y están diseñados con precisión a menos del grosor de un cabello para que un ladrillo hecho hoy aún encaje con uno hecho hace 60 años”.
La empresa dijo que ha probado más de 600 materiales diferentes para sus ladrillos LEGO, incluyendo algunos derivados de “caña de azúcar de fuentes sostenibles” y materiales reciclados de encimeras de cocina de mármol artificial.
“Otros materiales han mostrado potencial, pero no han cumplido con nuestros estrictos requisitos de calidad, seguridad y durabilidad, o no habrían ayudado a reducir nuestra huella de carbono”, decía el comunicado, añadiendo que la compañía está en camino de que “el 60% de los materiales que compramos sean producidos a partir de fuentes sostenibles” para finales de año.
Incluso después de todos estos años, LEGO continúa evolucionando.