Estados Unidos dice que su ejército realizó un “ataque masivo” contra el grupo Estado Islámico (IS) en Siria, en respuesta a un ataque mortal contra fuerzas estadounidenses en el país.
El Secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hegseth, declaró que la Operación “Hawkeye Strike” tuvo como objetivo eliminar “combatientes, infraestructura y sitios de armamentos” del IS.
Aviones de combate, helicópteros de ataque y artillería golpearon múltiples objetivos en el centro de Siria, según dijeron oficiales estadounidenses a la CBS, la cadena asociada a la BBC en EE.UU. También participaron aviones desde Jordania.
La semana pasada, Washington informó que dos soldados y un intérprete civil estadounidense murieron en una emboscada del IS en la ciudad siria de Palmira, con el presidente Donald Trump prometiendo una “represalia muy seria”.
En una publicación en X el viernes por la noche, Hegseth escribió: “Esto no es el comienzo de una guerra, es una declaración de venganza. Los Estados Unidos de América, bajo el liderazgo del presidente Trump, nunca dudarán y nunca cejarán en defender a nuestra gente.
“Si atacas a estadounidenses – en cualquier lugar del mundo – pasarás el resto de tu corta y ansiosa vida sabiendo que Estados Unidos te cazará, te encontrará y te matará sin piedad.
“Hoy, cazamos y matamos a nuestros enemigos. A muchos de ellos. Y continuaremos”, añadió el secretario de defensa.
Mientras tanto, el Comando Central de EE.UU. (Centcom) dijo que “las fuerzas estadounidenses han comenzado un ataque a gran escala” contra el IS, agregando que se dará más información pronto.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (SOHR), con sede en el Reino Unido, dijo que fueron atacadas posiciones del IS cerca de las ciudades de Raqqa y Deir ez Zor.
Informó que un líder prominente del IS y varios combatientes resultaron muertos.
El IS no ha comentado públicamente. La BBC no pudo verificar los objetivos inmediatamente.
Centcom, que dirige las operaciones militares estadounidenses en Europa, África y el Indo-Pacífico, había dicho antes que el ataque mortal en Palmira fue realizado por un pistolero del IS, quien fue “abatido y eliminado”.
Otros tres soldados estadounidenses resultaron heridos en la emboscada. Un oficial del Pentágono dijo que ocurrió “en una área donde el presidente sirio no tiene control”.
Al mismo tiempo, el SOHR dijo que el atacante era un miembro de las fuerzas de seguridad sirias.
Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque, y la identidad del pistolero no ha sido revelada.
En 2019, una alianza de combatientes sirios apoyada por EE.UU. anunció que el IS había perdido el último territorio que controlaba en Siria, pero desde entonces el grupo yihadista ha llevado a cabo algunos ataques.
Las Naciones Unidas dice que el grupo todavía tiene entre 5.000 y 7.000 combatientes en Siria e Irak.
Las tropas estadounidenses han mantenido una presencia en Siria desde 2015 para ayudar a entrenar a otras fuerzas como parte de la campaña contra el Estado Islámico.
