El defensor ecuatoriano Mario Pineida falleció a los 33 años tras recibir un disparo en Guayaquil.
Según informaron medios locales, Pineida fue baleado el miércoles por dos personas en motocicleta que les abrieron fuego a él, a su madre y a otra mujer frente a un comercio al norte de la ciudad.
El Ministerio del Interior de Ecuador anunció que ha enviado una unidad policial especial para investigar el caso.
Guayaquil se ha convertido en un foco de violencia pandillera y narcotráfico, registrándose 1.900 asesinatos entre enero y septiembre, la cifra más alta del país.
En septiembre fueron asesinados tres futbolistas de segunda división y en octubre un jugador local resultó herido en otro tiroteo.