Disputas internas en MAGA estallan en la Conferencia de Turning Point USA

PHOENIX — Los seguidores de MAGA se reunieron aquí el jueves para dar comienzo al America Fest de Turning Point USA, el mayor encuentro de la organización desde que su fundador, Charlie Kirk, fuera asesinado a tiros en un campus universitario de Utah en septiembre.

A pesar de ese trasfondo triste, el evento rápidamente se convirtió en un espectáculo de peleas internas dentro de MAGA.

Ben Shapiro, el primer orador después de la viuda Erika Kirk, criticó duramente a aquellos que subirían al mismo escenario en las próximas horas y días. Señaló a comentaristas conservadores, atacando a Candace Owens, Tucker Carlson, Megyn Kelly y Steve Bannon calificándolos de “farsantes y estafadores”.

“El movimiento conservador está en serio peligro”, dijo Shapiro, argumentando que el peligro no viene solo de la izquierda, sino “de charlatanes que dicen hablar en nombre de principios pero en realidad trafican con teorías conspirativas y deshonestidad”.

Llamó a Bannon “un relaciones públicas de Jeffrey Epstein” antes de la inminente liberación de archivos relacionados con el fallecido delincuente sexual convicto, mientras elogiaba al presidente Donald Trump y el manejo de su administración del tema. Trump presionó para que los republicanos en el Congreso no votaran para liberar los archivos, aunque firmó la legislación una vez aprobada. Tanto Bannon como Trump aparecen en fotos con Epstein que fueron publicadas por los demócratas en la Cámara.

Shapiro se centró especialmente en Carlson —tanto por promever las teorías conspirativas de Owens sobre el asesinato de Kirk como por su reciente entrevista con el influenciador de extrema derecha Nick Fuentes, un negacionista del Holocausto que ha difundido repetidamente estereotipos antisemitas. Carlson, ex presentador de Fox News, ahora transmite su programa en X y regularmente obtiene millones de visualizaciones.

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“La gente que se negó a condenar los ataques verdaderamente viciosos de Candace —y algunos de ellos van a hablar aquí esta noche— son culpables de cobardía”, dijo Shapiro, añadiendo después: “Si entrevistas a un apologista de Hitler, amante de los nazis, pedazo de basura antiestadounidense como Nick Fuentes… deberías asumirlo”.

Tanto la entrevista a Fuentes como las conspiraciones de Owens han envuelto al partido en las últimas semanas. El miércoles, Shapiro pidió a la Heritage Foundation, el poderoso think tank conservador cuyo presidente defendió la entrevista, que cambie su postura sobre la promoción de Fuentes por parte de Carlson.

Carlson respondió con furia desde el escenario el jueves.

“Ese tipo es pomposo”, dijo Carlson, comentando que se “rió” al ver fragmentos del discurso de Shapiro entre bastidores. “¿Llamados a censurar en un evento de Charlie Kirk? Es hilarante.”

Carlson continuó quejándose contra la cultura de la cancelación, y prometió al público que él no es antisemita. “El antisemitismo no es solo travieso, es inmoral”, afirmó.

Erika Kirk se refirió a las fracturas del movimiento MAGA, presentando a su difunto esposo como un raro unificador y rogando a la multitud que acepte el desacuerdo. “No van a estar de acuerdo con todos en este escenario durante el fin de semana”, dijo. “Y eso está bien. Bienvenidos a Estados Unidos.”

El evento no fue completamente tenso. El actor Russell Brand —que habló entre Shapiro y Carlson— se centró en el cristianismo, mientras incluía ataques a las vacunas y a la industria farmacéutica en sus comentarios. Y más temprano, los asistentes bailaron con música animada, corearon repetidamente “USA” y celebraron el regreso de Trump a la Casa Blanca en el Phoenix Convention Center, que está cubierto con imágenes de Charlie Kirk. Más de 30,000 personas se reunieron para el evento.

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La influencia de Kirk en los jóvenes fue especialmente evidente, con miles de asistentes de secundaria y universidad, algunos de los cuales se tomaron fotos frente a una carpa que se parecía a la que tenía Kirk detrás cuando le dispararon durante “The American Comeback Tour”.

Erika Kirk —que ahora es la CEO de Turning Point— dijo que el 80% de los asistentes nunca habían estado en America Fest antes, y un tercio de ellos eran estudiantes. Más de 140,000 personas han enviado solicitudes para unirse a la organización desde la muerte de Kirk, llevando la membresía a más de 1 millón de personas en 4,000 capítulos en escuelas y universidades, añadió.

Aunque el grupo ha recibido oradores de todo el espectro conservador, tomó decisiones claras sobre qué políticos invitar al escenario, ofreciendo una idea de cómo la organización espera moldear el futuro del Partido Republicano. El fiscal general de Texas Ken Paxton y el representante republicano Mike Collins, ambos candidatos al Senado, y los aspirantes a gobernador Andy Biggs de Arizona y Byron Donalds de Florida, tuvieron un espacio en el escenario principal.

Erika Kirk también se aseguró de prometer impulsar al vicepresidente JD Vance —quien cerrará el evento el domingo— hacia la Casa Blanca en 2028. Vance lidera las primeras encuestas del probable campo republicano.

“Vamos a lograr que el amigo de mi esposo, JD Vance, sea elegido para el ’48 de la manera más contundente posible”, declaró.

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