Johanna Chisholmand
BBC Verify
Cómo se desarrolló el tiroteo en la playa Bondi minuto a minuto
Era una noche que prometía traer "alegría y luz" a la icónica playa Bondi de Sídney, mientras multitudes de familias judías se reunían en un parque para celebrar la primera noche de Hanukkah, también conocida como la fiesta de las luces.
Ellos estaban entre miles de otros bañistas, surfistas y personas tomando el sol que habían acudido a la playa más famosa de Australia en una sofocante tarde de verano.
Pero poco después de que el evento de Hanukkah comenzara a las 17:00 hora local y se repartieran los primeros donuts gratis, la música festiva fue ahogada por el sonido de gritos y el eco de disparos.
No está claro exactamente cuándo se realizó el primer disparo, pero la llamada inicial a la policía se hizo a las 18:47. En los minutos siguientes, dos hombres armados mataron al menos a 15 personas e hirieron a docenas más, según las autoridades.
Una profesora de secundaria local, Chavi, contó a la BBC que se tiró al suelo para proteger a su bebé mientras "las balas volaban por encima nuestro".
"Era un pandemonio y un caos", dijo otro asistente, que se identificó como Barry, mientras describía ver a una multitud de personas intentando escapar de la escena que de repente se había convertido en una pesadilla.
En un video verificado por la BBC, aún se puede escuchar música alegre del evento de Hanukkah de fondo mientras las personas se agachan y se oyen disparos, intercalados con chillidos.
La música, inquietantemente alegre, sigue sonando mientras la cámara recorre la hierba, revelando cuerpos postrados e inmóviles, su condición poco clara.
Otras imágenes muestran grupos de personas tumbadas unas sobre otras en el césped, mientras una mujer trata de cubrir la cabeza de un niño pequeño con su mano.
El pánico pronto se extendió desde el parque hasta la arena, donde los videos muestran a aterrorizados bañistas corriendo lejos de los disparos.
Gritos, bocinas de coches y sirenas de ambulancias llenan el aire en los siguientes caóticos minutos. Algunos coches chocaron mientras la gente intentaba desesperadamente huir, según contaron testigos a la BBC.
Video de testigo muestra a personas huyendo de la playa mientras suenan disparos
Un video de casi 11 minutos, verificado por la BBC, proporciona quizás la línea de tiempo más clara del ataque, aunque no está exactamente claro en qué momento comenzó la grabación.
Comienza cuando los dos hombres armados cruzan Campbell Parade, la larga carretera bordeada de cafeterías que rodea la playa, y suben a un puente peatonal sobre el parque donde se celebraba el evento de Hanukkah.
Es desde allí donde dos hombres, identificados como Sajid Akram, de 50 años, y su hijo Naveed, de 24, supuestamente usan esa posición elevada para llevar a cabo el resto del ataque, utilizando lo que un experto dijo a la BBC que eran "dos escopetas deportivas".
Un hombre, que se cree que es Naveed Akram, permanece en el puente, mientras el otro se dirige hacia el parque a pie. Los disparos continúan escuchándose a intervalos de un segundo en algunas imágenes, mientras se oye a gente gritar.
Cuando el hombre mayor, que se cree que es Sajid Akram, comienza a alejarse del puente, empieza a disparar a la gente.
Fairfax Media
Decenas de servicios de emergencia llegaron a la playa Bondi después del tiroteo
Solo unos minutos más tarde, un transeúnte, que se ve agachado detrás de coches aparcados, sorprende a Sajid y logra quitarle el arma en unos segundos.
El hombre armado se aleja tambaleándose, y el hombre, identificado como Ahmed al Ahmed, le apunta con el arma antes de dejarla contra un árbol y poner las manos en alto para señalar a los agentes que él no es el sospechoso.
Ahmed, que recibió dos disparos durante el ataque, ha sido aclamado como un héroe y elogido por el primer ministro de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, por salvar "incontables vidas" con su valiente acción.
Sin embargo, menos de un minuto después de ser desarmado, Sajid Akram vuelve al puente y reanuda los disparos contra la gente con otra arma.
El tiroteo se detiene unos dos minutos después, cuando parece que ambos hombres son alcanzados por el fuego policial.
Aproximadamente a los siete minutos y medio del video, la policía llega al puente donde se encuentra con una escena muy tensa: dos hombres con heridas de bala —los presuntos tiradores— y una multitud de espectadores, algunos de los cuales parecen patear a los hombres en el suelo.
La policía confirmó más tarde que uno de los hombres armados, Sajid Akram, fue hallado muerto en el lugar, mientras que el otro resultó gravemente herido y fue llevado al hospital, donde permanece.
La policía dice que ambos hombres vivían a aproximadamente una hora en coche de la playa Bondi, en una casa en Bonnyrigg, un suburbio del oeste de Sídney.
Sin embargo, días antes del ataque, se habían trasladado a un alquiler temporal en Campsie, unos 30 minutos más cerca de la playa, según informaron medios de comunicación.
Su casa familiar en Bonnyrigg se ha convertido en uno de los principales focos de la investigación policial. Agentes allanaron la vivienda el domingo por la noche.
Las imágenes de la redada muestran a tres personas saliendo con las manos en alto, mientras policías fuertemente armados con equipo táctico rodeaban el perímetro.
Esas personas fueron arrestadas, pero ya fueron liberadas sin cargos.
EPA
La policía registra la casa en Bonnyrigg el domingo por la noche
Todavía no está claro si las armas utilizadas en el ataque eran propiedad de los dos hombres, pero Sajid Akram poseía seis armas de fuego registradas y tenía una licencia de armas recreativa.
Su hijo, Naveed, fue investigado por sus estrechos vínculos con una célula del Estado Islámico (IS) con base en Sídney después de que las autoridades tuvieran conocimiento de su actividad en 2019, informó la ABC.
Pero el primer ministro australiano, Anthony Albanese, dijo que se hizo "una evaluación de que no había indicios de ninguna amenaza continua o riesgo de que él fuera a cometer actos violentos".
Los residentes de esta por lo demás tranquila calle suburbana han descrito cómo el tumulto de las últimas 48 horas ha alterado el vecindario.
"Mi hija me gritaba: ‘mamá, mira afuera’, y vi mucha policía, muchos coches, sirenas y altavoces pidiéndoles que salieran", contó a la BBC Lemanatua Fatu, que vive frente a los hombres.
"Entonces vi las noticias —pensé, Dios mío, no pueden ser ellos".
Con aportes adicionales de Gabriela Pomeroy y Thomas Spencer