Uno de los ambientes navideños más festivos de Andalucía no se encuentra en sus grandes ciudades ni en sus bulliciosas plazas, sino en una minúscula calle peatonal de Marbella, rebosante de luces, adornos y ornamentos artesanales confeccionados por los propios residentes.
Este lugar encantador, que se ha convertido en una parada indispensable durante la temporada navideña, es la Calle Córdoba de Marbella, un enclave mágico repleto de luces centelleantes, árboles de Navidad, manualidades, trineos y afecto vecinal. Se ubica entre la Huerta de Los Cristales y Peñuelas, junto al ya demolido antiguo Estadio Municipal Lorenzo Cuevas.
Cientos de personas acuden cada año a Marbella para experimentar de primera mano este rincón tan bello, gracias al trabajo artesanal de los vecinos de la decena de viviendas que flanquean la calle. Pasear por su reducido espacio produce la sensación de adentrarse en una postal navideña de cuento, completa con luces, abetos, figuras inflables, Papá Noeles, buzones para cartas a Santa, belenes e incluso el propio trineo del personaje.
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De una iniciativa vecinal pandémica a un gran atractivo turístico
Todo esto es obra de los residentes, quienes han invertido semanas en crear e instalar sus decoraciones para transformar su calle en un mundo de fantasía. Lo que convierte a la Calle Córdoba en uno de los lugares más hermosos de la provincia de Málaga es el esfuerzo sincero y la unión de sus vecinos. Afligidos por la crisis sanitaria de 2020, decidieron llenar de luz y alegría su pequeño rincón de la ciudad para celebrar la Navidad.
El concepto sin duda hunde sus raíces en la cultura andaluza de la “verbena” – una fiesta callejera organizada y sostenida por todos los vecinos de una vía, en la que todos participan y se fomentan las buenas relaciones.
Poco a poco, cada vecino contribuyó con lo que pudo, ya fuera con sus propias decoraciones, manualidades o adquisiciones, transformándolo en un elemento turístico consolidado de la ciudad. Ahora, en su quinto año consecutivo, la tradición continúa creciendo, atrayendo multitudes con nuevas temáticas y detalles artesanales aún más elaborados cada temporada.