El tribunal más alto de Francia ha mantenido la sentencia contra el expresidente Nicolas Sarkozy por el financiamento ilegal de su campaña de reelección en 2012.
Fue declarado culpable de gastar demasiado en su campaña y luego contratar una firma de relaciones públicas llamada Bygmalion para ocultarlo.
A Sarkozy, de 70 años, se le impuso una condena de un año en 2024, de la cual seis meses fueron suspendidos. Esto significa que podrá cumplirlos usando una tobillera electrónica en vez de ir a la cárcel.
Él siempre ha negado todas las acusaciones.
Los fiscales del caso dijeron que el partido UMP de Sarkozy gastó casi el doble del límite de 22.5 millones de euros en su campaña, derrochando en mítines y eventos de lujo.
Para esconder los costos, el UMP le pidió a Bygmalion que facturara al partido, en lugar de a la campaña.
Esta es la segunda condena definitiva para el expresidente, quien estuvo en el poder desde 2007 hasta 2012.
En diciembre pasado, el Tribunal de Apelaciones mantuvo una condena por corrupción y Sarkozy tuvo que usar una tobillera electrónica durante seis meses.
Luego, en septiembre, fue sentenciado a cinco años de cárcel por conspiración criminal.
Pasó 20 días en la cárcel antes de ser liberado a principios de noviembre.
Un juicio de apelación se llevará a cabo el próximo año. Hasta entonces, Sarkozy estará sujeto a una supervisión judicial estricta y no podrá salir de Francia.
Días después de su liberación, el equipo de Sarkozy anunció que el expresidente está escribiendo un libro sobre sus tres semanas en la cárcel, titulado “El diario de un prisionero”.
Un extracto del libro fue publicado en las redes sociales: “En la cárcel no hay nada que ver y nada que hacer. Olvido el silencio que no existe en La Santé, donde hay mucho que escuchar. Aquí, el ruido es, desafortunadamente, constante. Pero – como en el desierto – la vida interior se fortalece en la prisión.”