Una mujer de treinta y ocho años, de origen brasileño pero con pasaporte irlandés, se enfrenta a una condena de dieciocho meses por una agresión sexual acaecida en un hotel de Magaluf en junio.
El suceso tuvo lugar aproximadamente a las seis de la tarde del cuatro de junio en el spa de un hotel ubicado en la calle Tirso de Molina. La mujer entabló conversación con un ciudadano sueco de veinte años en la sauna. Posteriormente, ambos abandonaron la sauna. Él se dirigió a la piscina y, poco después, accedió a los baños turcos. La mujer se hallaba en dicho lugar. Acto seguido, esta le colocó la mano sobre los genitales y los manoseó a través de la toalla. El joven le manifestó que no estaba interesado y procedió a denunciar los hechos.
La Policía de Calví́a localizó a la mujer, quien se encontraba en compañía de su marido y negó haber tocado al sueco de manera inapropiada. Acto seguido, hizo acto de presencia la Guardia Civil.
Ante el juzgado, la acusada manifestó su pesar por lo ocurrido, arguyendo que creyó que el joven estaba interesado. Quedó en libertad con cargos y tiene prevista una nueva comparecencia judicial en breve.