Justo al lado del *stand* balear en la feria World Travel Market de Londres se encuentran los puestos de Grecia y Turquía. A pesar de mostrarse como buenos vecinos, afables y cordiales, subyace en ambos países una misión clara: arrebatarle turistas a Mallorca.
Esta mañana, los hoteleros locales señalaron que tanto Turquía como Grecia están pugnando con denuedo por desviar turistas de la isla. Si bien los empresarios del sector no se muestran excesivamente preocupados, la amenaza es real y Mallorca debería permanecer alerta.
En líneas generales, el ánimo entre los hoteleros mallorquines es optimista. Trabajan intensamente por alargar la temporada y hoy han anunciado que para febrero casi el 50 por ciento de los hoteles estarán operativos.
La opinión generalizada en Londres es que Mallorca no tiene de que preocuparse en cuanto a la temporada alta. Se han recibido con agrado los nuevos vuelos desde Canadá y el Golfo, que se suman a las conexiones directas ya existentes desde Nueva York.