El Ayuntamiento de Palma ha impuesto sendas multas a tres minimercados del Paseo Marítimo por la venta de alcohol fuera del horario permitido, tras las inspecciones efectuadas por la Policía Local a principios de mes.
Estas actuaciones se emprendieron a raíz de una denuncia de la asociación de vecinos, la cual había alertado sobre la continuada comercialización de bebidas alcohólicas en horario restringido. Los agentes visitaron varios establecimientos a principios de octubre y constataron que tres de ellos habrían infringido la ordenanza municipal que regula la venta de alcohol en la ciudad.
Dos de los locales sancionados figuraban entre los específicamente mencionados en la queja vecinal. Cabe destacar que uno de los tres ya había sido multado en agosto por la misma infracción.
Multas de mil euros
Cada minimercado ha sido sancionado con 1.000 euros, cantidad que se encuadra dentro del baremo de multas establecido por la ordenanza de Palma, que oscila entre los 750 y los 1.500 euros.
Fuentes municipales señalaron que esta medida se enmarca en los esfuerzos continuos por garantizar la tranquilidad y el orden en las zonas residenciales colindantes al concurrido litoral palmesano.
«Seguiremos actuando con firmeza para garantizar el cumplimiento de las ordenanzas municipales y proteger la paz y el descanso de los residentes», declaró el Consistorio en un comunicado.
Las autoridades añadieron que la Policía Local mantiene una vigilancia continua en toda la ciudad, intensificando las operaciones durante los meses estivales. Algunas de estas actuaciones se han llevado a cabo de forma conjunta con la Autoridad Portuaria de Baleares, con el objetivo de velar por el cumplimiento normativo y una convivencia pacífica entre vecinos y comercios.
De acuerdo con las cifras facilitadas por el Ayuntamiento, durante el verano se interpusieron 52 actas de denuncia a establecimientos del Paseo Marítimo por incumplir la normativa municipal. Entre estas infracciones se incluyeron la venta no autorizada de alcohol y otras faltas relacionadas con el horario comercial y alteraciones del orden público.
Esta zona, uno de los tramos más frecuentados de Palma por autóctonos y turistas por igual, ha sido objeto desde hace tiempo de quejas por parte de los residentes, quienes denuncian el ruido y la actividad durante la madrugada vinculados a la venta irregular de alcohol.
La campaña de control prosigue
El Ayuntamiento de Palma confirmó que las operaciones de control se extenderán durante el invierno, con la Policía Local realizando inspecciones periódicas para asegurar el acatamiento de las normas comerciales de la ciudad.
Las últimas sanciones forman parte de una iniciativa más amplia dirigida a hacer valer la ordenanza municipal sobre alcohol y conciliar la vibrante vida nocturna del área con el derecho al descanso de los vecinos.
Los responsables reiteraron que la colaboración entre la Policía Local y la Autoridad Portuaria de Baleares continuará desempeñando un papel clave en el mantenimiento del orden en la zona costera.