La mansión en Santa Margalida que fue encargada por el compositor británico John Barry a principios de los años setenta ahora cuenta con la condición de bien protegido.
El ayuntamiento ha incorporado la propiedad a su catálogo revisado de edificios protegidos. Se le ha otorgado una protección de nivel A2 en reconocimiento a su valor arquitectónico y a su singular vinculación cultural con Barry, quien alcanzó la fama por haber compuesto las bandas sonoras de once películas de James Bond, así como de filmes galardonados con Oscars y BAFTAs, como ‘Born Free’ y ‘Out of Africa’.
Las nuevas incorporaciones al catálogo fueron aprobadas inicialmente en marzo y sometidas a información pública en abril. El pleno municipal más reciente refrendó finalmente el catálogo revisado.
La mansión de Barry nunca llegó a terminarse. El compositor fue víctima de un estafo que tardó años en resolverse. Había dejado la gestión del proyecto en manos de una persona en quien creía poder confiar, pero los fondos se destinaron a otros fines.
Barry había visitado Mallorca con asiduidad durante los sesenta. Durante un tiempo lo hizo acompañado de su entonces esposa, Jane Birkin. Tras salir a la luz los problemas con la construcción de la mansión, juró no volver jamás a la isla, aunque al parecer lo hizo en 2005 para poder ver “el elefante blanco”.
La propiedad fue vendida por la herencia de Barry a un empresario inmobiliario alemán, Kristian Worbs, en 2016. Éste tiene la intención de finalizar las obras, habiéndose alcanzado un acuerdo con el consistorio para preservar ciertos elementos característicos.
La aprobación de la protección por parte del ayuntamiento se ha producido a pesar de un informe del departamento de patrimonio del Consell de Mallorca que alegaba que la propiedad carecía tanto de valor arquitectónico como patrimonial.