Aunque podría considerarse el portaaviones más grande y poderoso del mundo, hoy en el Puerto de Palma ocupa un segundo puesto. El Gerald R. Ford desplaza unas 100.000 toneladas, mientras que el crucero MSC Seaview lo supera ligeramente con 150.000 toneladas. El portaaviones se encuentra en la bahía de Palma, mientras que el transatlántico está atracado en el Dique del Oeste.
El gigantesco crucero es ligeramente más corto… 323 metros frente a los 337 del portaaviones, pero el MSC Seaview puede albergar hasta 7.000 pasajeros y tripulación, en comparación con los 4.500 del Gerald R. Ford. Naturalmente, el portaaviones resulta imbatible en lo que a armamento se refiere, y por su puesto, transporta hasta 80 aeronaves, incluyendo el caza de quinta generación F-35.
El MSC Seaview cuenta con 18 cubiertas y una eslora de 323 metros, un calado de 8,55 metros, un puntal de 12,1 metros y una manga de 41 metros.
Su capacidad total de pasajeros es de 5.119, distribuidos en 2.066 camarotes, con una dotación de 1.413 tripulantes alojados en 759 cabinas, lo que supone un aforo máximo de 6.592 personas.
El portaaviones, de propulsión nuclear, no necesita repostar combustible y su coste de construcción fue muy superior al del crucero.
