El español Marc Márquez culminó su increíble historia de regreso al alzarse con su séptimo campeonato mundial de MotoGP, equiparándose así con el italiano Valentino Rossi.
Márquez, de 32 años, finalizó segundo en el Gran Premio de Japón por detrás de su compañero de equipo italiano, Francesco Bagnaia, lo que le otorgó una ventaja insalvable en la clasificación del campeonato con cinco carreras por disputar, asegurando así su primer título desde 2019.
Sostuvo el casco entre sus manos y rompió a llorar sobre su motocicleta al cruzar la línea de meta, antes de ser congratulado por su hermano Alex, quien había sido su rival más cercano en la lucha por el título esta temporada, pero que terminó sexto en Motegi.
“Es imposible siquiera articular palabra, solo quiero disfrutar del momento, pero es cierto que ha sido difícil, súper difícil, aunque ahora me hallo en paz conmigo mismo”, declaró un emocionado Márquez.
El logro de Márquez llega tras una auténtica “pesadilla” que dio comienzo en 2020.
Tró de conseguir cuatro campeonatos consecutivos entre 2016 y 2019, el piloto sufrió una serie de lesiones, incluida la fractura de su brazo en 2020, que precisó de cuatro intervenciones quirúrgicas a lo largo de dos años.
Los años subsiguientes estuvieron plagados de graves lesiones y importantes accidentes, y en 2023 abandonó Honda después de once años para incorporarse a Ducati.
“Cometí un grave error en mi carrera al pretender volver demasiado pronto de la cirugía. Y luego luché, luché y luché… ¡y volví a ganar! Por eso ahora estoy en paz”, añadió.
Márquez acumula once victorias esta temporada y ha ampliado su ventaja en el campeonato hasta los 201 puntos sobre su hermano, quien ocupa la segunda posición.