La transformación de las ciudades españolas impulsa actualizaciones contínuas de las normas de tráfico para adaptarse a las nuevas formas de movilidad. El incremento progresivo en el uso de patinetes y bicicletas eléctricas ha generado un escenario en el que la convivencia del espacio público requiere de reglas claras y bien definidas.
A partir del 1 de julio de 2025, la señal S-43 comenzó su instalación en varias vías urbanas. Su principal propósito es organizar la coexistencia entre peatones, ciclistas y usuarios de Vehículos de Movilidad Personal (VMP), como los patinetes eléctricos, para garantizar una circulación más segura y ordenada.
Esta nueva señal de tráfico es particularmente significativa, ya que no solo establece un espacio común para estos usuarios, sino que también delimita de forma clara las zonas reservadas para cada grupo, previniendo así conflictos y accidentes derivados de una convivencia no regulada.
Características de la señal S-43
La señal S-43 es fácilmente reconocible por su diseño cuadrado y fondo azul, un color que, según el Reglamento General de Circulación, indica información, obligación o orientación. En su interior, incluye pictogramas que representan a un peatón, una bicicleta y un patinete eléctrico.
Su función es informar a los usuarios de que se encuentran en una vía especialmente diseñada para la convivencia segura de estos tres tipos de usuarios, con zonas claramente diferenciadas para cada uno, marcadas mediante pintura vial o incluso separaciones físicas.
Motivación de su implementación
El aumento exponencial de la movilidad sostenible en España y la necesidad de ciudades más humanas han impulsado la creación de esta señal. La convivencia entre peatones y vehículos no motorizados ha generado históricamente problemas debido a la ausencia de normas claras e infraestructuras adecuadas.
Obligaciones y responsabilidades de los usuarios
El uso correcto de las vías señalizadas con S-43 conlleva obligaciones específicas para cada grupo de usuarios. Los peatones deben respetar su espacio destinado al tránsito a pie y evitar invadir el carril de bicicletas y patinetes; aun teniendo prioridad, es crucial para su seguridad y la de los demás.
Los ciclistas y usuarios de VMP están obligados a circular exclusivamente por su carril reservado, moderando la velocidad según las condiciones ambientales y manteniendo una distancia de seguridad con otros usuarios. Asimismo, deben extremar la precaución en los puntos donde estos carriles confluyan con pasos de peatones o zonas de tránsito mixto.