Israel nombró al comisario de policía retirado Yoram Halevy para liderar COGAT, la unidad militar que gestiona la ayuda humanitaria en Gaza y la coordinación con la Autoridad Palestina y organizaciones mundiales.
El Ministerio de Defensa anunció el domingo por la noche que Israel eligió al comisario retirado Yoram Halevi como el nuevo responsable de la ayuda humanitaria en Gaza, nombrándolo jefe del Coordinador de las Actividades Gubernamentales en los Territorios (COGAT).
Este nombramiento marca la primera vez que un ex oficial superior de policía dirigirá la unidad de las Fuerzas de Defensa de Israel responsable de supervisar los asuntos civiles en Judea, Samaria y Gaza. Halevi reemplazará al Mayor General Ghassan Alian, quien ha desempeñado el cargo durante los últimos cuatro años.
El Ministro de Defensa, Israel Katz, dijo que la elección se produjo tras una “consideración cuidadosa” de varios candidatos.
“Yoram Halevi tiene una amplia experiencia por la gran variedad de puestos que desempeñó con gran distinción en la Policía israelí, incluso como comandante del Distrito de Jerusalén,” dijo Katz. “Él conoce bien las comunidades judías en Judea y Samaria y el tema palestino, y estoy convencido de que cumplirá la función de la mejor manera posible.”
COGAT ha desempeñado un papel central en la implementación de las políticas de ayuda humanitaria de Israel en Gaza durante la guerra en curso. El puesto también implica gestionar la sensible coordinación con la Autoridad Palestina y las organizaciones internacionales.
Halevi, de 61 años, ascendió en los rangos de la Policía israelí, sirviendo como comandante de la élite unidad antiterrorista Yamam, jefe de la Policía Fronteriza, jefe del Distrito Sur y, finalmente, comandante del Distrito de Jerusalén. Se le otorgará el rango militar de Mayor General y se unirá al Estado Mayor General de las FDI.
Halevi posee títulos en ciencias políticas y educación. Su hijo, el Inspector Jefe Yitev Lev Halevi, un oficial de Yamam, falleció en combate durante el conflicto actual.
Aproximadamente 1.200 personas fueron asesinadas y 252 israelíes y extranjeros fueron tomados como rehenes en los ataques de Hamas contra comunidades israelíes cerca de la frontera con Gaza el 7 de octubre. De los 48 rehenes restantes, se cree que unos 20 siguen con vida.