España se mantiene a la vanguardia del crecimiento económico en la eurozona, con un PIB que se prevé aumente un 2.5% este año | Crédito: donvictorio/Shutterstock
El pasado sábado 23 de agosto, CNBC publicó un artículo sobre España, destacando que su economía crece a un ritmo muy superior al de sus vecinos europeos, impulsada por el turismo, la inversión extranjera y la inmigración.
La economía española también se ha visto reforzada por los fondos Next Generation EU de la Unión Europea, que han puesto a disposición de España 163 mil millones de euros en subvenciones y préstamos. El país es el segundo mayor beneficiario de esta asistencia para la recuperación pospandémica, después de Italia.
Desde que invirtió en energías verdes en la década de 2000, España se ha beneficiado de costes energéticos un 40% más bajos y ha experimentado un menor impacto durante la crisis energética europea que siguió a la invasión rusa de Ucrania en 2022. La inversión extranjera directa en España ocupa el cuarto puesto como destino más atractivo de la UE para los inversores. Solo China ha anunciado que invertirá hasta 11 mil millones de euros en España en 2025, en preparación para un récord de 33 nuevos proyectos en el país. No obstante, Estados Unidos sigue siendo el mayor inversor en España. El país del sur de Europa se mantiene como líder en crecimiento en la eurozona, con un producto interior bruto anual previsto que crecerá un 2.5% este año. Se pronostica que las economías de Francia, Alemania e Italia se expandirán un 0.6%, un 0% y un 0.7%, respectivamente.
La economía avanzada número uno
“Por segundo año consecutivo, seremos la economía avanzada número uno en términos de crecimiento del PIB”, afirmó el Ministro de Hacienda de España, Carlos Cuerpo, a CNBC en abril. “Exportamos más en términos de servicios a empresas de TI, servicios contables y financieros, de lo que exportamos en turismo: 100 mil millones de euros [116.8 mil millones de dólares] frente a 94.95 mil millones de euros en turismo”.
Sin embargo, a pesar del crecimiento, España se enfrenta a varios desafíos, incluidos el mantenimiento de los salarios acordes con el aumento del coste de la vida, la reducción del déficit y la deuda pública, un panorama político cada vez más dividido y la tasa de desempleo más alta de la UE.
