Tyrese Haliburton de los Indiana Pacers mira un partido de práctica durante su campamento de baloncesto en el Indiana Pacers Athletic Center, el sábado 23 de agosto de 2025, en Westfield, Indiana. (AP Photo/Darron Cummings)
WESTFIELD, Indianapolis — La estrella de los Indiana Pacers, Tyrese Haliburton, volvió a la cancha de baloncesto y estaba de pie otra vez el sábado.
No, no estaba corriendo o tirando a canasta — es demasiado pronto para eso, solo lleva dos meses recuperándose de su lesión en el tendón de Aquiles, una recuperación cada vez más común en la NBA. Pero fue un avance.
LEER: NBA: La estrella de los Pacers, Tyrese Haliburton, estará fuera la próxima temporada
Y estar en el Indiana Pacers Athletic Center en las afueras de Indianápolis, rodeado de más de 300 jóvenes entusiastas del campamento de baloncesto, también le devolvió a Haliburton su sonrisa brillante.
“Estoy caminando con mi bota, acercándome a caminar normal con mi zapato, eso es emocionante,” dijo. “Cada pocas semanas, es como un nuevo paso, un nuevo logro. Son las pequeñas victorias ahora. Hay días buenos y días malos, cada día es como el mismo día. Solo trato de mejorar.”
El sábado fue un buen día. Había progresado suficiente para sacarse fotos, dar entrevistas y caminar, con una bota protectora, por el centro.
Nada de esto hubiera sido posible a finales de junio cuando este evento estaba planeado originalmente. Esos planes cambiaron en el momento en que la pantorrilla derecha de Haliburton se sintió mal durante el primer cuarto del Juego 7 de las Finales de la NBA. Haliburton cayó al suelo inmediatamente, dejando a compañeros, entrenadores y fanáticos en shock.
Necesitó ayuda para salir de la cancha y vio el resto del partido desde el vestuario con su padre, John. Los Pacers perdieron esa noche, y Haliburton salió del estadio con muletas, sabiendo el diagnóstico probable — una cirugía que lo dejaría fuera toda la próxima temporada.
LEER: NBA: Tyrese Haliburton no se arrepiente después de la cirugía de Aquiles
Algo positivo: Haliburton dijo que no va a apresurar su recuperación y se está rehabilitando con la otra estrella herida de Indiana, la dos veces All-Star de la WNBA Caitlin Clark. Ella no ha jugado desde el 15 de julio por una lesión en la ingle derecha, su tercera lesión muscular esta temporada.
“Es una pena que ella haya estado lesionada tanto tiempo, pero para nosotros es bueno poder hablar, incluso en su recuperación hacemos pesas a la misma hora, así que estamos solo nosotros dos en el gimnasio,” dijo. “Ojalá ella pudiera jugar, pero creo que es bueno tenernos el uno al otro en este momento.”
Haliburton ha seguido las recuperaciones del base de Portland Trail Blazers Damian Lillard y del alero de Boston Celtics Jayson Tatum, quienes también sufrieron lesiones en el tendón de Aquiles en los playoffs y podrían perderse toda la próxima temporada. Tatum dijo recientemente que las primeras seis semanas después de la lesión fueron “probablemente las seis semanas más difíciles de mi vida.”
Al menos tres jugadores de los Pacers — Haliburton, Isaiah Jackson y James Wiseman — pueden entenderlo. Jackson y Wiseman se lesionaron los tendones de Aquiles a principios de la temporada pasada, y esperan estar listos para el primer partido de Indiana el 23 de octubre contra el campeón defensor Oklahoma City. Así que ellos han estado dando consejos y ánimos.
“Tenemos como un pequeño grupo de Aquiles en nuestro propio vestuario,” dijo Haliburton. “Significa mucho para mí porque te cansas de quejarte con los preparadores físicos. Sabes que solo hacen su trabajo, hacen todo lo posible. Pero a veces poder hablar, quejarte, con esos chicos significa mucho.”
LEER: NBA: El futuro brillante de los Pacers es más incierto después de la lesión de Haliburton
Las cajas de cartas que ha recibido de admiradores en Indiana, su estado natal de Wisconsin, de Iowa donde fue a la universidad, y de todo el país también han ayudado.
También ayuda ver a sus compañeros — antiguos y nuevos. El alero James Johnson voló a la ciudad para trabajar en el campamento. Los bases novatos Taelon Peter y Kam Jones también estaban allí, al igual que el orgulloso y apasionado padre de Haliburton, que saludaba y conversaba con cualquiera que quisiera parar.
Pero quizás la mejor medicina para Haliburton fue estar en público, pasar tiempo con todos esos niños sonrientes con sus camisetas del campamento de Tyrese Haliburton.
“Muchos de estos niños se acercan a mí diciendo ‘Yo estuve en este partido de playoffs y en ese partido’,” dijo Haliburton, sonriendo de oreja a oreja. “Así que creo que mostrar que no soy, ellos pueden pensar que soy como un ser mítico. Sé que yo pensaba eso cuando tenía su edad. Así que es genial estar aquí, frente a los niños, pasando el rato con ellos. Me encanta estar cerca de esto.”