¿Está Gran Bretaña al borde de una crisis financiera? Todos los gobiernos laboristas que ha tenido este país han llevado a Gran Bretaña a una crisis financiera. Ustedes lo recuerdan tan bien como yo.
Así que veamos a lo que se enfrenta Rachel Reeves de cara al Presupuesto de Otoño. El déficit actual es de 152 mil millones de libras para 2024/25, lo que representa más del 5 por ciento del PIB, mientras que la deuda nacional es de aproximadamente el 100 por ciento del PIB.
La inflación ha subido a casi el doble del objetivo del Banco de Inglaterra, alcanzando un 3.8 por ciento en julio comparado con la meta del 2 por ciento.
Era del 2.2 por ciento cuando el Partido Laborista asumió el poder hace solo 13 meses, así que casi se ha duplicado.
‘La inflación ha subido a casi el doble del objetivo del Banco de Inglaterra’
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Los costos de endeudamiento son otra gran preocupación, ya que afectan directamente al déficit y deben pagarse anualmente. El bono a 30 años alcanzó un 5.6 por ciento esta semana, un máximo de 27 años.
Y eso es antes de siquiera llegar al agujero negro de 50 mil millones de libras previsto en las finanzas públicas que la Ministra de Hacienda, Rachel Reeves, debe enfrentar.
Los rumores sugieren que está considerando imponer un impuesto a las ganancias patrimoniales por la venta de viviendas o incluso un impuesto a las mansiones, un último esfuerzo para tapar el hueco que inevitablemente perjudicaría el crecimiento.
Las señales de advertencia están encendidas.
El Instituto Nacional de Investigación Económica y Social predice un crecimiento lento, un mercado laboral débil, el aumento de los costes de bienestar y pagos por intereses de la deuda que superan los 111 mil millones de libras.
Para ponerlo en contexto: 111 mil millones de libras es más que el presupuesto de defensa, más que el presupuesto de educación y casi igual que la factura anual de pensiones estatales, gastado solo en intereses.
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Eso significa que subidas de impuestos o recortes de gasto son inevitables.
Para cumplir con sus reglas fiscales, Rachel Reeves podría necesitar 51.1 mil millones de libras adicionales, equivalente a una subida del impuesto sobre la renta del 5 por ciento para todos.
Mientras tanto, aunque los tipos de interés se bajaron al 4 por ciento el 7 de agosto, la inflación creciente puede hacer que más recortes sean imposibles este año.
Eso ejerce presión sobre la libra esterlina.
Rachel Reeves se prepara para su declaración del Presupuesto de Otoño | PA
Ha subido ligeramente en 2025, pero su estabilidad depende de que los mercados internacionales sigan dispuestos a financiar la deuda de Gran Bretaña.
La conclusión es clara: con el gasto fuera de control, los impuestos a punto de subir aún más y la confianza de los inversores disminuyendo mientras la gente se va del país, Gran Bretaña sí parece estar al borde del colapso financiero.
Se avecina otra crisis financiera socialista.