El Ayuntamiento de Palma cerró esta mañana tres de sus principales playas tras la tormenta inusual de la noche anterior, que ocasionó algunos daños.
Según fuentes municipales, las playas de Cala Major, Can Pere Antoni y Platja de Palma permanecieron cerradas al baño esta mañana.
El consistorio indicó que las dos primeras lucían bandera roja, mientras que Platja de Palma seguía accesible al público pero con prohibición expresa de bañarse. Además, en Ciutat Jardí ondeaba la bandera amarilla (que implica precaución, mas no veto).
Este cierre se produce tras las lluvias registradas durante la madrugada; las precipitaciones suelen provocar vertidos mixtos (aguas pluviales y residuales) al mar.
En un comunicado, el ayuntamiento afirmó esperar reabrir las playas para el baño lo antes posible.
