Entre enero y junio, las autoridades han localizado 31 cuerpos en las aguas y playas de las Baleares, posiblemente víctimas de naufragios de pequeñas embarcaciones con migrantes provenientes de Argelia. Según datos de las fuerzas de seguridad a la Delegación del Gobierno balear, los primeros 15 cuerpos hallados entre enero y marzo —recuperados por la Guardia Civil y la Policía Nacional— se sumaron a otros 15 encontrados entre el 13 de abril y el 3 de junio.
Aunque las cifras oficiales no detallan su distribución por islas, al menos cuatro aparecieron en Formentera: dos el 7 de enero en Es Cavall d’en Borràs, uno el 15 en Sa Torreta (islote de S’Espalmador) y el cuarto el 3 de febrero en S’Alga.
De los 15 localizados desde abril, ocho fueron rescatados en aguas cercanas y siete en costa. Según la Delegación, el 13 de abril un cuerpo fue trasladado a Puerto Sóller, y el 15 otro fue hallado entre Ibiza y Formentera.
En mayo, se reportaron más hallazgos: el día 7, uno a 3.5 millas de Puerto Sóller; el 9, dos (uno a 16 millas al suroeste de Formentera y otro a 6 al oeste de la isla). El 12 apareció uno cerca de Dragonera y el 13 otro en Sa Conillera. El 16, un cuerpo fue recuperado a 1.5 millas del faro de Formentor, y el 28 otro en Dragonera.
A finales de mayo y principios de junio, Formentera registró múltiples casos: el 31, dos cuerpos en sus aguas y uno en Migjorn; el 1 de junio, uno cerca de Espardell, y el 2, otro en Sant Francesc. El penúltimo apareció el 3 de junio en Santa Eulària (Ibiza). Se sospecha que son migrantes fallecidos al cruzar desde Norte de África.
Sin embargo, el estado de descomposición y la falta de pruebas de ADN impiden su identificación. El último cuerpo —el número 31— apareció el 4 de junio en Cala Jondal (Ibiza). La Guardia Civil investiga si también corresponde a un migrante.
