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Por enésima vez, un representante del Gobierno Balear ha repetido la línea de que solo hay hacinamiento en ciertos lugares en ciertos momentos del año. El último en hacerlo ha sido Pere Joan Planas, jefe de la agencia de estrategia turística AETIB. Él tiene una solución (puede que tenga más de una) para estas causas temporales de incomodidad ciudadana. Una distribución más equilibrada de turistas a lo largo del año. Sí, también hemos escuchado esto en varias ocasiones.
Estaba hablando en el contexto del deseo del gobierno de calmar las ansiedades de las protestas contrarrestando la cobertura mediática negativa. Pero sus referencias solo sirvieron para reforzar la impresión de que el gobierno está constantemente fallando en entender el sentimiento público, seguro de confundir a todos con datos objetivos para hacer su punto y así desestimar la subjetividad de las percepciones. Cuando finalmente se revelan estos datos objetivos, eso es.
El hacinamiento es lo que la gente percibe. No se puede escapar de esto, al igual que no se puede escapar de las creencias sobre el impacto del turismo en la vivienda. Los ciudadanos, prometió el Presidente Prohens hace un año más o menos, serían escuchados. Las cosas tenían que cambiar.
Entonces, ¿dónde está la evidencia? Es, por ejemplo, una ilusión creer que las preocupaciones por el hacinamiento pueden ser evitadas con este mantra de ciertos lugares-ciertos momentos, mientras que el gobierno (el PP) está tan atado a Vox para finalmente aprobar su presupuesto que ha estado dispuesto a retroceder en ciertas medidas. Quizás el gobierno espera capear la tormenta, rezando por el agotamiento de las protestas. Ese es un juego arriesgado.
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